A pocas jornadas de haberse iniciado 2024, el puerto malagueño ya ha vivido su primera operativa de exportación aceitera. Atracado el pasado día 10 en el muelle número seis el buque tanque Stolt Surf, 4.500 toneladas de aceite de oliva de diversas calidades fueron cargadas con destino a los puertos norteamericanos de Baltimore y Nueva York; una gestión llevada a cabo por la empresa malagueña Olistock dedicada a la logística de importación y exportación marítima de aceites vegetales. Movilizados desde los depósitos que esta empresa tiene situados en el muelle cinco, diferentes partidas de oliva virgen extra, virgen extra orgánico, oliva y orujo refinados fueron transvasados al mencionado buque tanque que en la tarde del jueves 11 finalizó su carga.

Con esta primera operativa ya realizada, las expectativas al respecto de los tráficos oleícolas en aguas malagueñas dibujan un buen panorama para el recién estrenado año; unos movimientos que pretenden superar las 60.000 toneladas que se gestionaron en el pasado ejercicio. Fruto de este interés por consolidar e incrementar una actividad con un muy amplio recorrido histórico en los muelles malacitanos, Olistock, implicada de una forma continuada en estos trabajos desde 2007, a finales del pasado ejercicio firmó un contrato con la Autoridad Portuaria para el uso de las instalaciones de Silos del Puerto; un conjunto de 34 depósitos ubicados en el muelle número siete.

Frente a este acuerdo cerrado por tres años al que habría que añadir la opción de una ampliación temporal acompañada de un proyecto de para la construcción de nuevas instalaciones, el puerto de Málaga afronta el arranque de 2024 con unas posibilidades totales de almacenaje de 15.000 toneladas de aceites vegetales.

Ante esta circunstancia y, teniendo en cuenta que Olistock participa tanto en la logística malagueña de importación de aceite de girasol como en la de exportación vía marítima de todo el aceite de oliva a granel que se comercializa en Estados Unidos, las posibilidades que ofrecen los 57 depósitos de diversas capacidades que esta empresa gestiona repartidos entre los muelles cinco y siete convierten al puerto malacitano en un punto estratégico a la hora de hablar del transporte aceites vegetales por mar.

Un tráfico continuo con unas muy buenas expectativas que, a pocas jornadas de haberse iniciado 2024 ya ha efectuado una primera operativa exportadora.