Las farmacias de Málaga, en el punto de mira de los atracadores

El robo a las farmacias se está convirtiendo en un habitual en los últimos tiempos en Málaga. Esta pasada madrugada, el asalto a una botica en el Puerto de la Torre, en la capital, ha acabado con los tres presuntos atracadores y un agente de Policía Nacional muertos. El fatídico desenlace se ha desencadenado durante la persecución a los presuntos autores. El vehículo en el que viajaban los sospechosos a la fuga circulaba al parecer en sentido contrario y ha terminado chocando frontalmente en una salida de la A-7 hacia Torremolinos con un coche que conducía el policía.

Este ha sido el segundo robo a una farmacia que ha trascendido en tan solo una semana. En la madrugada del pasado jueves se produjo un robo exprés nocturno en una farmacia, en la barriada de Los Prados.

Cuatro encapuchados que iban armados con mazas y que consiguieron huir con el botín. El asalto, según pudo saber este periódico, fue perpetrado en escasos minutos. Las pesquisas apuntaban a que los sospechosos tenían claro cuál iba a ser su objetivo: "Han ido por la caja con el dinero; no se llevaron medicamentos ni otros elementos de valor", aseguró en declaraciones a este periódico una de las trabajadoras.

No fueron unos ladrones sigilosos. El estruendo que provocaron los golpes con las mazas puso en alerta a vecinos y comerciantes de la zona, entre ellos de algunos bares, que ya habían abierto sus puertas. Para irrumpir en el negocio, la investigación apuntaba a que los atracadores, “corpulentos y cubiertos con pasamontañas”, reventaron a golpes una puerta de cristal del lateral hasta lograr acceder por un agujero de grandes dimensiones. "Han despertado al barrio", reconoció una de las empleadas. Pero lo más llamativo, dice, es que los autores parecían conocer con exactitud dónde se situaba la caja registradora con el efectivo. Dejaron intactos los dispositivos electrónicos.

Pero no han sido los únicos asaltos en los últimos meses; entre abril y mayo se produjeron otros dos robos en farmacias de la capital, uno también en Puerto de la Torre, y el otro en Carretera de Cádiz. Todos ellos con el mismo modus operandi: de madrugada, perpetrados en tan solo unos minutos y con mazos para reventar los escaparates.

En el del Puerto de la Torre fueron dos los hombres que, con el rostro oculto, una maza y un hacha, fracturaron el cristal de la botica para acceder y llevarse el dinero en efectivo del cajón.

Y en Carretera de Cádiz, igualmente unos encapuchados rompieron el escaparate, causando algunos destrozos más en el interior del local, para acabar llevándose también la caja con el dinero en efectivo.