El Hospital Pascual ha negado su responsabilidad en las humedades de la cripta del Santuario de la Victoria después de que Ricardo Ramírez, miembro del consejo parroquial de ese Bien de Interés Cultural se achacara el problema a unas obras en los baños del centro sanitario sin la impermeabilización suficiente.

Según la empresa Manuel Pascual Pascual SA, hace tres años hubo una incidencia que se subsanó y no se repitió. Entonces, los técnicos de Pascual visitaron la cripta y advirtieron del alto grado de humedad y que debían instalar ventilación forzada. “Desde entonces, los responsables del BIC no han realizado ninguna actuación”, denuncia Pascual.

“Lo fácil en estos casos, es echarle las culpas a los demás y no asumir su propia responsabilidad de falta de mantenimiento y de inversión en un Bien de Interés Cultural que tienen en propiedad y a su cargo. Cuando se dan cuenta que el deterioro es muy grande entonces acuden a la Junta de Andalucía para que aporte un dinero público que se debería haber aportado por el Obispado en su momento, para mantener en perfectas condiciones la Cripta de la Victoria, un bien de todos los malagueños en manos del Obispado”, señala la empresa del hospital en un comunicado remitido a Málaga Hoy.