Los hosteleros andaluces están satisfechos con el desarrollo de la Semana Santa, en la que "el tiempo ha acompañado" y la afluencia a sus establecimientos ha permitido elevar en torno a un 7 u 8 por ciento la facturación respecto al mismo periodo del pasado año.

El presidente de la federación Hostelería de Andalucía y de la asociación de hosteleros de Málaga (Mahos), Javier Frutos, ha manifestado este lunes a los periodistas que la Semana Santa ha sido "positiva" a nivel regional, lo que se ha notado especialmente en las capitales de provincia.

En la provincia de Málaga, la facturación ha aumentado entre un 8 y un 10 por ciento, y el buen tiempo ha permitido que haya asiduidad de turistas y público local también en las playas.

La mayor parte de la clientela ha sido nacional, que es el perfil de turistas que predomina en Semana Santa, aunque en el litoral esta celebración cada vez atrae a más público extranjero.

Pese al aumento de facturación en los locales, las empresas aún tienen el "hándicap de la rentabilidad", ya que no han alcanzado la que tenían en 2019, ha apuntado.

Frutos espera que los precios "se estabilicen", ya que las materias primas han subido un 15 por ciento, y las empresas además tienen que hacer frente al aumento de los costes energéticos o de personal.

A este respecto, ha apuntado que "con la falta de mano de obra cualificada, la competitividad hace que los sueldos suban".

La Semana Santa es el "pistoletazo de salida" de la temporada alta en la hostelería y el turismo en general, donde "la inercia es positiva" en los últimos meses, por lo que los empresarios confían en que el año sea "entero bueno", a diferencia de 2022, cuando no lo fue el primer trimestre.

"Esperemos que se equilibren los precios y la rentabilidad", ha deseado el presidente de Hostelería de Andalucía, quien ha recordado que muchas empresas han acumulado deudas durante la pandemia