El buen tiempo es el mejor aliado para el sector turístico. Lo es durante todo el año, pero en Semana Santa es clave porque se suele celebrar en marzo o abril, una época primaveral en la que la lluvia es frecuente, y porque es solo una semana, por lo que si llueve los días festivos se pierde el negocio. Y no solo de los hoteles, sino también de restaurantes, puestos callejeros, alquiler de coches... El turismo mueve una gran industria auxiliar y muchos miles de empleos en Málaga. 

Esta Semana Santa, pese a la lluvia del Martes Santo, ha habido suerte. Se esperan días soleados y calurosos desde este Miércoles Santo hasta el Domingo de Resurrección y, teniendo en cuenta que el Jueves y el Viernes Santo es fiesta en toda España, eso provoca que la gente se anime a venir a Málaga a pasar unos días, sobre todo el turismo nacional, empezando por el andaluz y continuando por el de otras comunidades autónomas, especialmente la madrileña y aquellas que tienen enlace directo con Málaga con el tren de alta velocidad. 

Son las famosas reservas de última hora, que cada vez son más importantes en el sector porque la decisión de los turistas se va retrasando y este fenómeno se ha acrecentado con la incertidumbre generada por la pandemia. La Asociación de Empresarios Hoteleros de la Costa del Sol (Aehcos) auguraba hace unos días una ocupación media en sus establecimientos del 70% y este miércoles ha mejorado esas previsiones hasta el 75% entre el Miércoles Santo y el Domingo de Resurrección, precisamente por esas reservas de última hora motivadas por el buen tiempo.  

"No cabe duda que la buena climatología y el buen desarrollo de la Semana Santa ha hecho que los niveles de ocupación sean mejores que los que esperábamos en un principio. Será un buen puente y esperemos marque el inicio de una clara recuperación del turismo”, ha asegurado el presidente de Aehcos, José Luque. 

Están contentos en el sector porque vuelve a haber movimiento, sobre todo teniendo en cuenta que hace un año estaban completamente muertos. En el aeropuerto de Málaga hay programados para toda esta Semana Santa 4.424 vuelos, que son el 90% de los existentes en esta misma fecha antes de la pandemia, lo que muestra el dinamismo de la zona y el interés que vuelve a despertar la Costa del Sol en los visitantes. Este Miércoles Santo estaban previstos 364 vuelos, el Jueves Santo 384, el Viernes Santo 417 y el sábado 440. Renfe ha añadido casi 11.000 plazas más en los AVE y en las carreteras se esperan millones de desplazamientos. 

Vuelve a haber, por fin, vida tras dos años horribles por la pandemia, pero aún se está lejos de los niveles de ocupación que se alcanzaron antes del Covid-19. 15 puntos para ser exactos, ya que en la Semana Santa de 2019 se llegó hasta el 90%. En cualquier caso, con un virus todavía en la calle, una guerra en plena Europa entre Rusia y Ucrania y una inflación por las nubes poco más se puede pedir. De hecho, se puede llorar con un solo ojo.

La ocupación hotelera, además varía según el sitio. En Ronda superan el 95%, en Marbella el 86% y en Nerja el 80%, mientras que en la capital están en el 78%. Las viviendas turísticas también están con una ocupación similar.