Málaga

El innovador superyate huevo 'Olivia O', en Málaga

Vista del superyate atracado en el muelle número dos.

Vista del superyate atracado en el muelle número dos. / J. C. Cilveti

A primeras horas de la tarde de este martes 15 de marzo, ha llegado al puerto de Málaga el superyate huevo de bandera maltesa Olivia O. Atracado en el muelle número dos, en la zona no concesionada a la futura marina de mega yates, este buque, amarrado junto al oceanográfico Francisco de Paula Navarro, ha mostrado su espectacular estructura; unas formas que lo hacen único en la flota de los más grandes y selectos barcos privados de recreo del mundo.

Disponiendo de una arquitectura que, hasta la fecha, sólo se había visto en remolcadores de altura y en algunos mercantes, el Olivia O presenta una proa invertida; un diseño desarrollado entre los años 2001 y 2004 por el grupo de construcciones navales noruego Ulstein que fue patentado con la denominación X-Bow. Apodados estos buques de proa invertida como barcos huevo, el atracado esta jornada en aguas malacitanas podría considerarse como el primer gran barco de recreo privado con estas características.

Propiedad del multimillonario israelí de 72 años Eyal Ofer, un hombre de negocios con intereses en asuntos navieros e inmobiliarios al que se le atribuye un patrimonio de algo más de 15.000 millones de dólares, el yate llegado en la tarde de este martes a Málaga luce el nombre de su hija.

Construido en los astilleros noruegos Ulstein (los propietarios de la patente de los barcos con proa invertida), este superyate, tras ser entregado en 2018 fue completado en la factoría naval maltesa de Palumbo en 2020. Con un diseño exterior firmado por la empresa Espen Øino y el astillero noruego, sus interiores corren a cargo del estudio milanés Droulers Architecture.

El superyate 'Olivia O', atracado en el puerto de Málaga. El superyate 'Olivia O', atracado en el puerto de Málaga.

El superyate 'Olivia O', atracado en el puerto de Málaga. / J. C. Cilveti

Con un coste de 200 millones de dólares (su mantenimiento anual está estimado en 20 millones), el Olivia O de 88 metros de eslora dispone de ocho camarotes que pueden albergar a un total de 20 pasajeros. Con 30 tripulantes y un helipuerto en su cubierta superior, este barco, con todos los estándares propios de los grandes buques de recreo privados, posee una piscina de 10 metros.

Propulsado por motores marinos de la marca Rolls Royce y clasificado como un barco privado de expedición, el primer superyate huevo del panorama marítimo internacional tiene previsto pasar la noche de este martes en las aguas del puerto de Málaga.

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