La problemática del ruido vuelve a ser objeto de debate en la Casona del Parque. Mientras pende la amenaza expresada por el sector hostelero de cerrar el próximo día 30, coincidiendo con el encendido del alumbrado navideño, la totalidad de los grupos con representación en el Consistorio han instado a las áreas de Seguridad y Medio Ambiente a ir adelante con las medidas necesarias para hacer cumplir la normativa en esta materia, incluyendo un aumento de las inspecciones y la aplicación del régimen disciplinario y sancionador contra los incumplidores. La unanimidad, por el contrario, ha quedado rebajada a un acuerdo mayoritario en lo tocante a las Zonas Acústicamente Saturadas (ZAS), a las que se sigue oponiéndose Ciudadanos y que no acaba de convencer al PSOE.

La cuestión ha sido objeto de debate en el seno de las comisiones de Ordenación del Territorio y de Medio Ambiente. En ambos casos tras sendas mociones por parte de Málaga para la Gente, en las que también se pedían más medios humanos y técnicos. Durante su intervención, el concejal de Medio Ambiente, José del Río, ha echado en cara a Cs y el PSOE su nula aportación en su tramitación, así como su apuesta por "ponerse de perfil en este asunto".

Del Río ha destacado la necesidad de poner en marcha medidas con las que reducir el impacto sonoro en el Centro y la zona de El Romeral, zonas urbanas que se delimitan dentro de estos planes antirruido. "Seguimos con nuestra hoja de ruta", ha señalado el edil, quien ha tratado con ello de tranquilizar a los vecinos. No obstante, se ha comprometido a estudiar "en profundidad" las alegaciones que se presenten en el periodo de información pública.

Y a modo de mensaje a los hosteleros, el concejal ha incidido en que la posición del equipo de gobierno del PP es la de, "dentro de la legalidad, estudiar la situación real del Centro". Una afirmación que pasa por la realización de nuevas mediciones y por el análisis de una posible variación de la zonificación acústica. Esta última demanda, sustancial para los hosteleros, ya fue puesta en cuestión por el alcalde, Francisco de la Torre, quien duda de su legalidad.

El concejal de Seguridad, Mario Cortés, también instado al respecto, ha puesto en valor el trabajo de la Policía Local, al punto de que en 2018 ya han sido incoados más de 600 procedimientos sancionadores. "El tema del ruido es tema muy serio; ya ha sido judicalizado en más de una ciudad y nosotros no nos lo tomamos a broma", ha comentado, al tiempo que ha señalado que todas las llamadas que se realizan para emitir una queja por exceso de ruido son atendidas.

Para el proponente de las iniciativas, Eduardo Zorrilla, portavoz de Málaga para la Gente, el tema del ruido "no puede ser tratado como conflicto de intereses entre vecinos y hosteleros; frente al derecho al descanso está el empresarial, que puede ser legítimo pero tiene que regularse". Zorrilla ha criticado al Ayuntamiento, dado que "no está garantizando el derecho al descanso de los vecinos". "Al alcalde se le ha ido de las manos el modelo turístico impuesto para la ciudad", ha sentenciado.

Ciudadanos, que está en contra de la manera en la que se ha ido adelante con la aprobación de las ZAS, sí ha sido contundente al reclamar el cumplimiento de las ordenanzas; incluso dedujo que de haberse actuado hoy “no habría tantos problemas o la necesidad de debatir sobre el ruido”.