Málaga registra 81 agresiones en centros de salud en lo que va de año, la mitad a médicos de familia
Cinco de estos ataques han sido físicos y 76 verbales, según los datos de Satse con cifras aportadas por el Distrito Sanitario Málaga Valle del Guadalhorce
Dos médicas y una enfermera del ambulatorio de Miraflores de los Ángeles sufrieron gritos, amenazas e insultos en las últimas semanas
El goteo de agresiones a profesionales en los centros de salud de Málaga no cesa. En total, en lo que va de año, han tenido lugar 81 episodios violentos, entre físicos y verbales, según el Sindicato de Enfermería Satse -con datos aportados por el Distrito Sanitario Málaga Valle del Guadalhorce-; mientras que el Sindicato Médico de Málaga (SMM), por su parte, tiene registrados 51 agresiones. Las tres últimas denunciadas por ambos sindicatos han tenido como víctimas a dos médicas y una enfermera del ambulatorio de Miraflores de los Ángeles, en la capital, quienes en distintos episodios han sufrido insultos, amenazas y gritos por parte de pacientes o sus acompañantes.
Tomando las cifras de Satse, que contabiliza no solo los ataques a sanitarios sino también a los trabajadores no sanitarios –auxiliares administrativos, celadores, conductores y jefes de grupo–, cinco agresiones habrían sido físicas y las 76 restantes verbales. De ellas, 61 afectaron a sanitarios. Las mujeres siguen siendo las más vulnerables, habiendo sufrido 55 casos frente a los 16 de hombres.
La mayoría de las agresiones se producen contra los médicos de familia, que entre enero y octubre han sufrido 41 ataques verbales y dos físicos. Le siguen los profesionales de Enfermería, con nueve casos. En ambos colectivos, la violencia vuelve a tener rostro femenino, con 29 mujeres médico frente a 14 hombres; y ocho enfermeras frente a uno.
El resto de agresiones acaecidas en este tiempo, según Satse, han afectado a una auxiliar de enfermería, dos coordinadores de Enfermería, dos directores de Urgencias, una médico residente, una fisioterapeuta, un pediatra y un veterinario.
Respecto a los trabajadores no sanitarios, son 20 las agresiones contabilizadas por Satse, una de ellas fue física contra un jefe de grupo administrativo. La mayoría (11) han sido a celadores o conductores, siendo siete los hombres y cuatro mujeres. Los auxiliares administrativos han sido víctimas de siete de estos episodios violentos, todas ellas de carácter verbal y contra mujeres.
En cuanto al escenario de estas agresiones, la inmensa mayoría se producen en las consultas médicas (35) o en el mostrador de admisión de los centros sanitarios (18). También son frecuentes en Urgencias (13) y en las consultas de enfermería (6). Otras dos han sido en casa de los pacientes.
Gritos, insultos y amenazas
Ayer, el SMM y Satse llevaron a cabo una concentración en el centro de salud Miraflores de los Ángeles para denunciar las tres últimas agresiones. La primera de estas tuvo lugar el 1 de octubre, cuando una enfermera acudió al domicilio de un paciente dependiente para hacerle unas curas, una visita rutinaria que acabó como “un episodio angustioso”, según relatan, denunciado “la agresividad e intimidación del agresor, que llegó a insultarla, a gritarle, a acorralarla contra la pared y hasta perseguirla por las escaleras cuando esta abandonó el domicilio”.
Al parecer, todo se produjo ante las quejas del cuidador de la paciente de que “cada día acudía una profesional distinta y tenían olvidada a la paciente”. La enfermera sufrió una crisis de ansiedad, según han señalado, y acabó avisando a la Policía e interponiendo una denuncia en la Comisaría por agresión y amenazas. Además de esto, días después, el individuo se personó en el centro de salud para volver a amenazar a la enfermera si no quitaba la denuncia. El 27 de octubre, una médica sufrió amenazas por parte de un usuario en la consulta. El motivo: el paciente no estaba de acuerdo con la prescripción de un fármaco por la profesional, además de “su impaciencia al esperar su turno”.
La más reciente de estas tres agresiones se produjo el 7 de noviembre cuando una paciente amenazó verbalmente a una facultativa, a la que también trató de agredir físicamente. “Le exigía alguna demanda y tuvo que intervenir la Policía”, señalaron SMM y Satse, que insisten no entender “cómo la población civil carga las tintas de la situación sanitaria en la comunidad autónoma contra los facultativos y enfermeros, que no son los responsables de las ineficiencias del sistema y, en ningún caso, deben ser agredidos ni verbal ni físicamente por estos u otros motivos”.
El año pasado, según los datos del Servicio Andaluz de Salud (SAS), toda la provincia de Málaga registró un total de 318. Ello supone casi una diaria y un incremento del 14% respecto al año anterior. De esa cifra, 69 fueron físicas y 249 verbales.
También te puede interesar
Lo último
CONTENIDO OFRECIDO POR SÁNCHEZ ROMERO CARVAJAL
Contenido patrocinado por Covap
CONTENIDO OFRECIDO POR AMAZON