Un militar portuario

Pedro José López Ruiz deja Málaga para poner rumbo a Bilbao

Pedro José López Ruiz, en el 'Príncipe de Asturias', el Día de las Fuerzas Armadas en Málaga.
J. C. Cilveti / Málaga

17 de abril 2012 - 01:00

Con el reducido equipaje de cualquier marino en activo, el capitán de corbeta Pedro José López Ruiz, dejaba ayer Málaga tras cuatro años como segundo de la Comandancia Naval. Despedido por sus compañeros y amigos malagueños, este gaditano nacido el 2 de agosto de 1960 en San Fernando ponía rumbo a su nuevo destino en la ciudad de Bilbao. Hijo de un suboficial de la Armada, Pedro (que así es como aquí se le ha conocido), inició sus estudios en la Escuela Náutica de Cádiz en 1977. Finalizada su carrera en el año 1980, comenzó a navegar como piloto de primera y tras 15 meses a bordo del transporte Aragón realizando las milicias universitarias, retomó su vida de marino mercante en diferentes buques tanque y de carga general.

Tras navegar por todos los mares del mundo, en 1990 ingresó en la Reserva Naval Activa, y ese mismo año se incorporó como alférez de navío en el patrullero de altura Atrevida con base en Canarias. Con posterioridad a su primer destino en un buque de guerra, y tras pasar por el remolcador Las Palmas y el buque de salvamento Neptuno, Pedro recaló en La Gomera, donde durante ocho años asumió la máxima responsabilidad en la ayudantía naval de la isla. Finalizado este periodo de tiempo, y ya como teniente de navío, fue destinado a la Comandancia Naval de Málaga, donde se incorporó como segundo comandante en 2008.

Con las ideas muy claras al respecto de cómo tiene que funcionar una Comandancia Naval: "En un destino como éste debemos estar siempre al servicio de la ciudad y muy especialmente de la comunidad portuaria", asegura. La actividad desempeñada en Málaga por este marino mercante reconvertido en militar ha destacado por su muy buen hacer y por su afán de colaborar con todos y cada uno de los estamentos e instituciones civiles de la ciudad. Tras convertirse en un portuario más, la imagen de un marino de guerra paseando por los muelles de Málaga ha sido muy común; y los galones, primero de teniente de navío y desde 2011 de capitán de corbeta de Pedro López, han servido, en muchas ocasiones, de perfecto enlace entre lo civil y lo militar en el puerto.

2 Comentarios

Ver los Comentarios

También te puede interesar

Lo último