Nuevos pasos para que Málaga tenga un Centro de Investigación del Cáncer

Comienza la contratación de informáticos y técnicos de laboratorio

La mortalidad por cáncer ha caído a la mitad en las últimas cuatro décadas

Un sanitario en un laboratorio, en una imagen de archivo.
Un sanitario en un laboratorio, en una imagen de archivo. / M. H.

“Aspiramos a que en unos 20 años, Málaga tenga un centro de investigación sobre el cáncer de nivel internacional y estamos poniendo las primeras piedras”. Así explicó el oncólogo Emilio Alba los pasos que instituciones y profesionales están dando desde hace más de un año con ese objetivo. El facultativo, que es el alma mater del proyecto, indicó que ya se ha empezado a contratar a técnicos –entre ellos, informáticos, bioinformáticos y personal de laboratorio– así como el equipamiento tecnológico necesario.

Los primeros pasos se dieron este pasado verano con la constitución de la Fundación Centro de Investigación y Terapias Avanzadas del Cáncer (CITAC). Ya entonces, el Ayuntamiento de Málaga aprobó en un Pleno extraordinario su participación como patrono fundacional. La fundación es público-privada.

Las instituciones públicas que la componen son, además del Consistorio malagueño, la Diputación provincial y la Universidad de Málaga (UMA). La Junta de Andalucía, de momento, no está entre ellas. Por el sector privado, los patronos son la Fundación Bancaria Unicaja, Unicaja Banco, la Fundación General de la UMA, la de Sando, la Fundación Kareema y Famadesa.

Alba comentó que se avanza en la creación del CITAC, pero que todavía las decisiones y medidas que se están adoptando son una “etapa preliminar”. No obstante, comento que la meta es, a lo largo de este año, “traer a un grupo de investigadores en cáncer y envejecimiento”. Aún no está determinado cuántos serán ni ha comenzado el proceso de selección de estos.

Será el primer grupo de investigadores. La finalidad es que en 2026 se sume otro dedicado a investigar la detección ultraprecoz del cáncer mediante biopsia líquida. Esta prueba es un análisis de sangre, pero que en lugar de detectar el colesterol o la glucemia –como en los que son rutinaria actualmente en los centros sanitarios–, pueden detectar fragmentos de ADN tumorales en el torrente sanguíneo y así diagnosticar el cáncer en una fase muy inicial. Hasta ahora, se han hecho avances en la detección precoz de procesos oncológicos mediante pruebas como mamografías, colonoscopias o citologías. Pero la senda de la investigación apunta ya al diagnóstico ultraprecoz mediante la biopsia líquida.

El CITAC tendrá dos ámbitos fundamentales de investigación. Uno de ellos, el diagnóstico ultraprecoz de las patologías oncológicas y otro referido a cáncer y envejecimiento. Y contará con dos características que siguen el mismo modelo de los centros de investigación más punteros de Europa: será público/privado y monográfico sobre el cáncer.

La creación de la Fundación este pasado verano fue el primer escalón para hacer realidad este ambicioso proyecto. Ahora toca la fase de empezar a atraer talento. Es decir, investigadores de primer nivel. Y con ellos, fondos para avanzar en la investigación; la clave para que mejoren los tratamientos y con ellos la supervivencia frente al cáncer. El modelo elegido para el CITAC es similar al del Vall d’Hebron Instituto de Oncología (VHIO), un centro de investigación que se sitúa entre los cuatro mejores de toda Europa.

La patología es ya la primera causa de muerte

Los tumores se situaron como primera causa de muerte en 2023, con un 26,6% del total de defunciones, seguidos de las enfermedades del sistema circulatorio (26,5%). Respecto al año anterior, los fallecimientos por tumores aumentaron un 0,2%, mientras que los de enfermedades del sistema circulatorio bajaron un 5,3%, según informó el pasado verano el Instituto Nacional de Estadística (INE). Estos datos suponen que, por primera vez, la tasa de muerte por tumores (237,8 por 100.000 habitantes) fuera superior a la de las enfermedades del sistema circulatorio (237,5). La publicación de las cifras del INE coincidieron precisamente este pasado julio con la constitución en Málaga de la Fundación del Centro de Investigación y Terapias Avanzadas del Cáncer (CITAC).

El año pasado, según los datos del Observatorio del Cáncer se diagnosticaron en la provincia de Málaga más de 10.000 nuevos casos de esta enfermedad. La tasa en 2024 fue de 566 nuevos diagnósticos. Desde 2012, hasta cuando se remontan los datos de ese organismo de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC) estas cifras no han parado de crecer. Entonces, fue de 494. Y la previsión es que siga aumentando hasta los 674 nuevos casos por 100.000 en 2025, cuando ya se estabilizará.

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