Los números cantan

LOS números cantan, pero en un tono u otro, según la voz que los interprete. Esta es la sencilla conclusión obtenida después de analizar los datos que sirvieron ayer para protagonizar un nuevo rifirrafe entre populares y socialistas. La portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Málaga, Begoña Medina, para calentar aún más el patio de la política municipal, desveló una cifra que ella misma calificó de espectacular. La deuda del Consistorio de la capital se elevó durante el último trimestre de 2010 en casi 50 millones de euros, lo que la sitúa al final del pasado ejercicio en 743 millones. También explicó que, según datos de la Intervención general municipal, al finalizar este año las estimaciones apuntan a que la citada deuda será de 922 millones, lo que provocará que, según el PSOE, cada familia malagueña deberá pagar unos 5.200 euros. Números que colocan a Málaga en el puesto número dos del ranking de las ciudades más endeudadas, tras la capital de España. Medina, que no olvida que estamos en precampaña, achacó la responsabilidad de la situación al candidato a la reelección por el PP y actual regidor, Francisco de la Torre, diciendo que es "un mal gestor" y acusándole de que "su incapacidad nos está llevando a la ruina".

El alcalde, aprovechando que asistía al acto de colocación de una primera piedra, otra más que parece destinada a simbolizar que los viejos proyectos no van a parar al limbo de los justos, adoptó cierto aire pedagógico y explicó que "los créditos son del Ayuntamiento, no de los ciudadanos, y éste los paga con sus ingresos". Para añadir que el Ayuntamiento malagueño "es de los más moderados fiscalmente del país".

Menos profesoral se mostró Carolina España, responsable directa de las arcas municipales. España prefirió seguir el argumentario clásico que recomienda defenderse diciendo que los otros lo hicieron peor, volvió a recordar que en 1995 el equipo de gobierno del PP heredó una deuda de 172 millones de euros y que la culpa de tanta penuria es atribuible al gobierno autonómico, ya que el Consistorio se ve en la obligación de gastarse los cuartos para suplir las carencias de servicios públicos que correspondería sufragar al ejecutivo andaluz. La responsable de la economía municipal, que también parece consciente de los tiempos que corren, no perdió la oportunidad para autoimponerse una medalla y llegó a decir que la situación financiera en la Casona del Parque es "envidiable", avalando sus tesis con el hecho de que "se está al día con Hacienda y la Seguridad Social, se dispone de remanentes positivos en caja y no se necesitan operaciones de tesorería para pagar a los proveedores, que cobran en poco más de dos meses". Como colofón justificó la situación asegurando que lo único que pone de manifiesto la deuda "es el enorme esfuerzo inversor que se realiza" y criticar que "el PSOE saque de contexto los datos oficiales para construir un argumento electoral".

Entre los derroteros por los que discurre la contienda electoral ayer se puso de manifiesto un hecho que no debe pasar desapercibido, porque podría llegar a ser revelador. Tanto Elías Bendodo como Miguel Ángel Heredia, en sendas intervenciones en la Cadena Ser para hacer balance de las convenciones que sus respectivos partidos celebraron el pasado fin de semana, dejaron la puerta abierta a un cara a cara entre María Gámez y De la Torre. Lo que se podría interpretar como que en las cocinas de ambas formaciones consideran que todo el pescado no está vendido, todavía.