‘La Perla’ y la ‘Gneisenau’

Doce años antes del hundimiento de la corbeta ‘Gneisenau’, Málaga vivió un incidente similar ocurrido en el mismo lugar donde el 16 de diciembre de 1900 naufragó el buque escuela alemán

Refugiado en Málaga

'Gneisenau' hundida en el mismo lugar donde naufragó la balandra 'La Perla' en diciembre de 1888
'Gneisenau' hundida en el mismo lugar donde naufragó la balandra 'La Perla' en diciembre de 1888 / M. H.

Inmersos en los actos que recuerdan los 125 años del hundimiento de la corbeta alemana Gneisenau el 16 de diciembre de 1900, hoy les traigo un desconocido y muy similar suceso marítimo; un grave accidente ocurrido doce años antes de que el mencionado buque escuela germano se perdiera.

Corría la primera quincena de diciembre de 1888, cuando procedente de Cartagena, la balandra La Perla navegaba con destino a Málaga. Transportando una serie de toneles vacíos y con la intención de cargar uno con aceite en los muelles malacitanos, este velero con matrícula de Mallorca tripulado por seis personas, en su acercamiento al puerto malagueño se encontraba con un fuerte temporal del sudeste en la jornada del jueves 13 de diciembre.

Manteniendo una alerta extrema ante la situación y ya de noche, ninguno de los cuatro tripulantes que el capitán de La Perla situó a proa pudo distinguir la luz ubicada en la escollera del este; una circunstancia que volvió a repetirse cuando la señal luminosa de la Farola, a la distancia en la que se encontraba la balandra, fue confundida con el alumbrado de la ciudad. Y así, azotada por el temporal y sin visibilidad, a las dos y media de la madrugada del viernes 14 de diciembre, La Perla impactó contra la escollera quedando encallada entre las piedras antes de que un golpe de mar destrozara su casco. Tras saltar del buque todos los tripulantes y después de una agónica lucha contra los rompientes, la dotación de la balandra, finalmente pudo alcanzar el espigón situado tras las piedras. Atendidos minutos después por un carabinero y por el jefe de talleres del puerto, los seis náufragos que recibieron como primera ayuda una copa de aguardiente, posteriormente, y ya con ropas secas, contaron con todo detalle a las autoridades lo que había sucedido.

Abierto un expediente por la Capitanía del puerto malagueño para esclarecer las causas suceso, entre los motivos de este hundimiento se habló mucho de la deficiente iluminación que existía en la entrada del puerto malacitano. Un incidente marítimo que, afortunadamente sin víctimas, ocurrió en la misma zona en la que hace ahora 125 años se produjo en hundimiento de la corbeta alemana Gneisenau.

stats