Las playas de La Malagueta y Huelin, reabiertas al baño tras tres días cerradas

Los tramos de las playas de La Malagueta y San Andrés cerrados el pasado jueves por la existencia de "importantes niveles de contaminantes microbiológicos", al parecer por la bacteria EntrerococcusE. coli, fueron reabiertos al baño a mediodía de ayer. Tras ser cerrados el pasado jueves por decreto de la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía, este mismo departamento determinó ayer y comunicó al Ayuntamiento de la ciudad la posibilidad de reabrirlos tras comprobar el estado normal de las aguas. Recibido el informe, sobre las 13:00, el Consistorio comunicó que tanto el área de Playas como la Policía Local habían iniciado el levantamiento de la prohibición en ambos puntos, aunque a sobre las 15:00 aún se podían ver carteles informando de la negativa a adentrarse en el agua.

La determinación de Salud toma como base los primeros resultados de las muestras que los técnicos recogieron el pasado jueves, que, según se observa, coinciden con los análisis que esa misma jornada realizó la Empresa Municipal de Aguas (Emasa) y que, según desveló ayer este periódico, ya confirmaban que el agua volvía a ser apta para el baño. No obstante, la concejala responsable de Playas, Teresa Porras, admitió que no se adoptaría medida alguna hasta disponer de la luz verde por parte de la Administración autonómica.

La existencia de este doble análisis, es decir, el realizado por el SAS y por el Ayuntamiento, ha generado el malestar de la Consejería de Salud. En un escrito remitido a los medios, este organismo destacó que el laboratorio que ha utilizado para analizar las muestras "cuenta con las acreditaciones, homologaciones y metodología que exige la normativa vigente y con profesionales con más de veinte años de experiencia en este tipo de trabajo" mientras que el de Emasa "no cuenta con la acreditación para analizar aguas marinas ni utiliza la técnica que exige y obliga el Real Decreto". Una situación, se apunta en el escrito, "reconocida por los propios integrantes de Emasa y que se le comunicó al Ayuntamiento, concretamente a la concejal de Playas, Teresa Porras".

En este escenario, Salud dice no entender "el continuo interés del Ayuntamiento, y en este caso de su concejal de Playas, Teresa Porras, de proporcionar una información que no se corresponde con la que se le ha ido facilitando". "Es cuanto menos contradictorio que ordenara por precaución el cierre de más metros de playa de la que le dictaminó la Delegación de Salud (100 metros a la derecha y 100 metros a la izquierda del Club Náutico, y otros 100 metros a la izquierda y 100 metros a la derecha de Huelin) y que se recoge en la normativa vigente, y que quiera ahora utilizar unos resultados analíticos que no cumplen la técnica y la metodología exigida por la ley", criticó la delegada provincial de Salud, María Antigua Escalera.

Desde la Junta se apostilla que "el único objetivo" de Salud es "salvaguardar la salud y el bienestar de los usuarios", en este caso de los bañistas, pero "ni ha querido ni buscado hacer daño a los empresarios y al sector turístico, que es de lo que nos acusa la concejal de Playas". "La colaboración y el diálogo con el Ayuntamiento ha sido permanente, buscando en todo momento la solución a una situación puntual que se había detectado por parte de Salud", añaden.

"Mi deseo ha sido siempre trabajar conjuntamente con el Ayuntamiento para resolver lo antes posible esta situación de cierre cautelar, por eso le pido a la señora Porras que podamos seguir trabajando desde la lealtad institucional, imprescindible entre administraciones, que entiendo comparte el objetivo común de buscar el bienestar para la ciudadanía ", insistió Escalera.

A todo ello, Salud recuerda que son los ayuntamientos los encargados de mantener las condiciones de limpieza y salubridad de la zonas de año, de colocar carteles informativos con las características, infraestructuras y medidas de seguridad, de vigilar los posibles puntos de vertido cercanos para evitar riesgos y adoptar las medidas de gestión que le requieran las administraciones sanitarias y ambiental.

La respuesta de la edil de Playas no se hizo esperar. "Esta señora (en alusión a la delegada de Salud) antes de haber hecho un decreto de cierre tendría que haber hecho un segundo análisis", contestó Porras, para la que "las cosas se podrían haber hecho de otra forma". "No es que lo diga yo, es que son las declaraciones de los empresarios de playas y los hoteleros", insistió. A su juicio, se tendría que haber realizado una segunda medición porque "en Málaga nunca se han dado esos parámetros". "No digo que haya mala intención, pero yo hubiese repetido los análisis como medida de precaución", indicó.