Premios Malagueños de Hoy 2024: Un equipo de talento
Los galardonados en esta edición son Miguel Ángel Medina y Ana Dácil; Sergio Pellicer; Berna Perles; Mario Nemirovsky y el Instituto Ricardo Valle de Innovación; y María Ramos y Mansour Konte
Camufladas entre las coberturas que la realidad acaba por estampar en las páginas de los periódicos, a menudo con un pie en el terreno de la adversidad, subyacen, algunas veces opacadas por esta vorágine informativa, toda una serie de historias humanas que hacen que siga mereciendo la pena echarle horas al asunto, ya sea dándole a la tecla cada día o examinando con detalle el resultado junto al café de la mañana. Hablamos de personas y proyectos que son ejemplos de entrega, superación y trabajo duro; verdaderos espejos en los que mirarse, que siguen adelante sin importar los contratiempos. A estos exponentes son los que cada año, desde su fundación hace este año dos décadas, reconoce la redacción de este periódico, que celebrará la XX edición de los Premios Malagueños de Hoy el próximo lunes 2 de diciembre en una gala que tendrá lugar en el Museo del Automóvil y la Moda a las 20:30 bajo el patrocinio de la Fundación Unicaja, y que contará con una amplia representación de la sociedad malagueña. En ella se reconocerá a aquellos que han llevado a cabo una labor preeminente en los planos de la investigación sanitaria, el deporte de élite, la expresión artística, el desarrollo empresarial y tecnológico, y la solidaridad.
Y es que este 2024 ha habido tiempo para despuntar en todas estas direcciones que nos marcan, a todos, el camino a seguir para ser mejores, dando como resultado un equipo de talento sin igual. Muestra de él son Miguel Ángel Medina y Ana Dácil, del Instituto de Investigación Biomédica de Málaga y Plataforma en Nanomedicina (Ibima Plataforma Bionand) y la Universidad de Málaga (UMA), y autores de un estudio pionero que revela el potencial antiangiogénico (es decir, que pueden frenar el avance de los tumores) del aceite de oliva virgen extra; el entrenador del Málaga CF, Sergio Pellicer, precursor de la vuelta del club al fútbol profesional; la soprano malagueña Berna Perles, una de las intérpretes más firmes y a la vez más prometedoras de la escena lírica nacional; el jefe de Microelectrónica de la Fundación Instituto Ricardo Valle (organismo al que también se reconoce), Mario Nemirovsky, cuya labor ha sido clave para la llegada del IMEC a la ciudad; y la presidenta de la Asociación de Cáncer de la Axarquía 'Esperanza', además de voluntaria con el resto de mujeres de su asociación en las labores de limpieza tras la DANA en Benamargosa, María Ramos; que comparte galardón con el joven de Guinea Conakry Mansour Konte, quien ayudó a una mujer en la calle Héroe de Sostoa de la capital durante las últimas lluvias torrenciales.
Miguel Ángel Medina y Ana Dácil: el aceite de oliva virgen extra frente a los tumores
Miguel Ángel Medina es catedrático del departamento de Biología Molecular y Bioquímica de la UMA y responsable del grupo de investigación del Instituto Ibima; y Ana Dácil, miembro del grupo de investigación 'Bases Moleculares de los Sistemas Biológicos (Sibiuma). Ambos han contribuido en la confección de un estudio de vanguardia publicado en la revista Journal of Agricultural and Food Chemistry que revela las bondades del aceite de oliva virgen extra, también denominado AOVE, como una sustancia con potencial antiangiogénico; es decir, que detiene o frena la formación de nuevos vasos sanguíneos, un aspecto determinante en enfermedades como el cáncer, puesto que los tumores necesitan formar nuevas vías para crecer y expandirse: bloqueado este proceso, se puede limitar el crecimiento de afecciones que dependen de la creación de estos vasos.
Un descubrimiento, huelga decir, de suma relevancia, con el añadido de que el aceite de oliva virgen extra es un elemento esencial de la dieta mediterránea y que cuenta con conocidos efectos beneficiosos sobre la salud gracias a sus propiedades antioxidantes o antiinflamatorias. Al respecto de este avance, Medina subrayó que "el uso de extractos de AOVE es una herramienta prometedora que nos anima a seguir investigando en esta línea con un enfoque que podría complementar los tratamientos actuales y ofrecer alternativas menos invasivas". Dácil, por su parte, quiso destacar que el estudio demuestra que los compuestos de este bien "no sólo son beneficiosos para la salud", sino que también "podrían tener aplicaciones terapéuticas en enfermedades donde la angiogénesis tiene un papel trascendental en el curso de la enfermedad”.
Segio Pellicer, el arrojo de jugarse el futuro
Sergio Pellicer es un malagueño de otra madre, es un hijo adoptivo. Es uno de esos muchos que vino de paso y acabó quedándose para siempre. Su progenie sí es autóctona, como lo son sus maneras, como lo es su corazón, que late al compás de La Rosaleda. Y como lo es su color de piel, tostado al sol de Málaga. “Pero de trabajar, eh”, que advertiría él mismo. Encarna los valores de cualquiera de los entrenadores más míticos del Málaga, del Club Deportivo y del Club de Fútbol. Ya mismo superará a Juan Ramón Muñiz, como ya dejó atrás a Manuel Pellegrini. Con un poco de suerte y un mucho de trabajo, terminará por sentarse más veces en el banquillo que el mismísimo Don Joaquín Peiró, que le da nombre a ese asiento. Palabras mayores.
El propio Sergio Pellicer diría que cualquier reconocimiento individual va un poco contra la naturaleza del fútbol en sí, un deporte que concibe como un todo colectivo donde cada cual aporta lo mejor que tiene para alcanzar un objetivo común. Así camina por la vida y así moldeó casi de cero un Málaga de cuyas cenizas brotó un precioso Fénix. Se hace merecedor de este reconocimiento por haber sacado lo mejor del Málaga en el peor momento de su historia reciente. Porque si Antoñito Cordero fue el héroe del ascenso en Tarragona con un gol para la leyenda, hubo un entrenador que tuvo el arrojo de jugarse su futuro, el de un club, el de una afición, a una sola carta. A la de un niño de 17 años. Además desde el convencimiento más absoluto.
Berna Perles: un nombre propio para el futuro de la ópera
La afición malagueña a la lírica conserva entre los hitos operísticos más relevantes de los últimos años la representación de Manon Lescaut de Puccini celebrada el pasado mes de mayo en el Teatro Cervantes. El público tuvo entonces la ocasión de disfrutar de una Berna Perles inolvidable en el papel protagonista, plena en su talento artístico, arrebatadora y generosa en una interpretación de muy difícil parangón en el presente. Y también pudieron comprobar los espectadores por qué Berna Perles figura ya, por derecho, al frente del panorama lírico nacional como cantante cada vez más reclamada en los primeros escenarios del país. En aquella ocasión, la soprano malagueña firmó una de esas raras ocasiones en que la emoción sobre las tablas del Cervantes es capaz de retar al tiempo. No era, ni mucho menos, la primera vez que el público de casa caía rendido ante su portentosa voz, pero, por si quedaba alguna duda, Berna Perles dejó claro que su órdago se conjuga en tiempo futuro. En un horizonte que no tiene límites.
Con Berna Perles celebramos un éxito para la lírica desde Málaga forjado sin atajos ni fórmulas fáciles, a base de constancia, dedicación y la proyección más fiel de una sensibilidad única en el escenario. Tras obtener el Premio Extraordinario Fin de Carrera en el Conservatorio Superior de Málaga, Perles continuó su formación en la Academia Nacional de Santa Cecilia en Roma, además de las clases junto a maestras como Montserrat Caballé y Teresa Berganza. Ha debutado en el Teatro Real, el Liceu, el Teatro de la Ópera de Oviedo, el Auditorio Manuel de Falla de Granada y en escenarios internacionales como el Capitole de Toulouse, el Avenida de Buenos Aires, la Opera Royal de Versalles, la Konzerthaus de Viena, el Teatro Comunale de Bolonia y la Ópera de Roma, entre otros. Ha cantado bajo la batuta de Dominique Rouis, Martin Mázik, Lorenzo Mariani, Edmon Colomer, Mario Menicagli o Manuel Hernández Silva y bajo la dirección escénica de Lindsay Kemp, Emilio Sagi, William Orlandi o Riccardo Canessa. Su repertorio lírico y sinfónico incluye ya las grandes partituras de la historia de la música. Pero el mayor éxito de Berna Perles consiste en la certeza de que el futuro de la ópera pasa ya, necesariamente, por su nombre. El de una malagueña de hoy y de siempre.
Mario Nemirovsky, artífice de la llegada del IMEC; y el Instituto Ricardo Valle de Innovación
Quizá el hito por el que es más conocido Mario Nemirovsky de cara a la galería es por su papel protagonista para que IMEC, el principal centro de diseño y desarrollo de chips del mundo, decidiera desembarcar en Málaga. "Esto es la semilla, la patada, para construir un ecosistema de microelectrónica que no sólo sea de Málaga, sino de Andalucía y de España", dijo entonces Sin embargo, su mediación en la llegada del coloso de los semiconductores no supone sino un apartado más en el currículum del jefe de Microelectrónica de la Fundación Instituto Ricardo Valle.
Doctor por la Universidad de Califonia Santa Bárbara, ha sido ingeniero senior y arquitecto jefe en General Motors; investigador de propiedad intelectual en Apple Computers; arquitecto jefe en National Semiconductors o profesor en la Institución Catalana de Investigación y Estudios Avanzados (ICREA). Igualmente, ha fundado empresas como XStream Logic, Consentry Networks, ViLynx, Starflow y Clevernet.
Por su parte, el Instituto Ricardo Valle, también premiado en esta edición, es un centro de investigación tecnológica aplicada a la industria que promueve, desarrolla y fomenta actividades de transferencia de conocimiento para generar valor en el mercado. Los campos en los que se desarrolla son la Microelectrónica, la Inteligencia Artificial, la Ciberseguridad y las Comunicaciones Avanzadas, que son aplicadas a sectores tractores como la Industria 4.0, los Sistemas Aeroespaciales, la Salud Digital, el Food Tech, el Vehículo Conectado y la Economía Circular.
Su principal objetivo con todo ello es apoyar el crecimiento de las empresas bajo la premisa de la reindustrialización basada en tres grandes pilares: la innovación disruptiva, la digitalización y la sostenibilidad. Unas misiones que se hacen acompañar de otras tres como impulsar la economía, aspecto que logran siendo un polo de innovación de valor y una cabeza tractora para la economía española; crear empleo de calidad, contribuyendo a la salida al mercado de nuevos puestos de trabajo de alto valor añadido y maximizando el impacto de la capacidad de I+D+i; y valorizar el conocimiento, algo que hacen potenciando la transformación de conocimiento en productos de alto valor económico.
María Ramos, la llamada de la solidaridad; y Mansour, el 'Héroe de Sostoa'
María Ramos es presidenta de la Asociación de Cáncer de la Axarquía 'Esperanza', dedicada a ayudar personas enfermas de cáncer con independencia de su localización tumoral. También presta servicio a sus familiares y allegados. Su andadura en el camino de la solidaridad arrancó en noviembre de 2010, aunque su actividad se hizo más intensa a partir de 2014, cuando inauguran su sede en Vélez-Málaga. Sus principales impulsoras fueron mujeres afectadas de cáncer de mama que de manera altruista quisieron ayudar a otras que padecían esta misma enfermedad; actualmente, cuentan con alrededor de 160 socios a los que se suman otros colaboradores.
No obstante, la lista de servicios desinteresados no acaba ahí ni para la asociación ni para su presidenta. Hace unas semanas, la propia Ramos respondió a la llamada de la solidaridad, junto a un nutrido grupo de socios voluntarios, para acudir a Benamargosa tras el paso de la DANA y ayudar en lo que pudieran. "Hemos ido a comercios de Vélez-Málaga, nos han regalado productos, y hemos reunido otros por nuestra cuenta. Igual que los demás, estamos con Benamargosa y ayudaremos en lo necesario", comentaba. Allí echaron un cable, en general, y se volcaron con los efectivos presentes y los habitantes repartiendo comida y preparando 600 bocadillos.
Durante las últimas lluvias torrenciales que afectaron a la provincia de Málaga también se experimentaron momentos tensos en la capital, que dejaron al menos una estampa positiva para el recuerdo, pues es en estos momentos cuando la verdadera naturaleza humana aflora. El protagonista fue el joven de 19 años Mansour Konte. Llegado hace un año a las playas de Canarias tras nueve días a bordo de una patera, aunque la odisea comenzó días antes, cuando partió de su país, Guinea Conakry, avistó desde su habitación a una mujer que se encontraba cercada por el agua e inmóvil en la calle Héroe de Sostoa y necesitaba ayuda.
No lo dudó: la cogió en brazos y la llevó a una zona segura entre los aplausos de los testigos, que lo ovacionaban desde sus ventanas. No sabía que uno de ellos lo grabó y difundió el vídeo en redes sociales. El joven continuó prestando apoyo a los agentes hasta que le pidieron que se cobijara en su domicilio y descansara. "Me duele en el corazón cuando llueve mucho. En mi país siempre rompe todo y tenemos que ayudar nosotros", expresó el joven en una entrevista con este periódico.
También te puede interesar
Contenido ofrecido por Ayuntamiento de Málaga
Contenido ofrecido por Ignacio Castillo Castrillón