"Nuestra presencia condicionará la acción del Gobierno", afirma Gil

Al compás de pasodoble cerraba ayer la sede de Podemos en Málaga. "Era un cuatro de diciembre cuando tomamos la calle, cuando dijimos qué verde y blanca era nuestra sangre", cantaba la comparsa Los Piratas en 1998 a la memoria del sindicalista Manuel José García Caparrós; unos versos que rescataron dos miembros de Podemos para echar el telón a una noche que dejó a la formación tres escaños en la provincia.

Los pronósticos que auguraban la irrupción de la formación en el Parlamento andaluz se cumplieron: 101.317 personas (15,08%) apostaron por la "marcha del cambio". En la sede de Podemos de la Plaza Montaño, la expectación dejó paso a los abrazos de celebración y los aplausos que se intensificaron al presenciar en la pantalla colocada para seguir los resultados la intervención de la candidata a la Presidencia de la Junta de Andalucía, Teresa Rodríguez. "Ahora veremos cómo se reconfigurará el espacio andaluz y si son posibles pactos. El resultado nos da la posibilidad de combinar la voz en las instituciones y la de la gente de la calle", valoraba minutos antes María José Teruel, militante de Podemos.

La sala terminó quedándose pequeña al final de la noche, cuando el número uno de la lista por Málaga, Félix Gil, intervino para valorar los resultados ante el centenar de simpatizantes del partido que había seguido la noche electoral . "Tenemos la satisfacción de estar juntos tras conseguir un resultado que nos sitúa en una posición excelente para influir en las decisiones que se tomen en el futuro e incluso en las del Gobierno", indicó Gil haciendo mención a uno de los temas más debatidos por los militantes durante toda la velada: los posibles pactos con Podemos como protagonista. "A partir de ahora nuestra presencia condicionará la acción del Gobierno; seremos los garantes de que la situación hasta ahora vivida acabe. Tenemos por delante el reto de hacer el trabajo para el cual la gente nos ha elegido: estaremos vigilantes y encima de todos", recalcó Gil.

Entre los gritos de "Sí se puede" y las palabras de felicitación, el secretario municipal de Podemos en Málaga, José Antonio Vargas, destacó el trabajo realizado en la campaña electoral por las fuerzas militantes y los círculos de la provincia: "Podemos ha demostrado que es una fuerza emergente que puede seguir adelante porque queda mucho camino por construir". En este sentido, las opiniones de los militantes reseñaban el "éxito" que suponía el resultado obtenido a pesar de la juventud de la formación, que en el caso de Málaga cuenta con presencia en 18 de los 103 municipios y que aún no ha constituido una estructura orgánica en Andalucía. La entrada en el Parlamento andaluz, según valoró Gil, "solamente es la primera parte de un partido que tiene un momento decisivo en las generales" y que en Málaga, " supone una cifra amplia para representar los intereses de la provincia en el Parlamento".

Junto Gil, otros dos malagueños se sentarán en el Parlamento andaluz: Esperanza Gómez, profesora de Derecho Constitucional de la Universidad de Sevilla, y Juan Antonio Gil, licenciado en Economía.