Tradición, talento y compromiso marcan la presentación de la nueva firma de abogados Montero Aramburu & Gómez-Villares Atencia

Más de 400 personas acudieron a la galería de presentación de la unión de las firmas Montero Aramburu & Gómez-Villares Atencia en el espacio Sohrlin. No solo acudieron empresarios, juristas y autoridades: también estuvieron presentes representantes de la cultura y de la sociedad civil, recordando que los clientes —las personas y proyectos que confían en los abogados— son, en definitiva, el verdadero pilar de la profesión. Entre ellos destacó la presencia de Antonio Banderas, símbolo de la Málaga más internacional, que compartió su experiencia como empresario y como civil que requiere en ocasiones de abogados y por qué confía en la unión de estos para poner de manifiesto una vez más el talento andaluz.

Durante toda la gala se repitió un lema marcado: tradición, talento y compromiso. La tradición se reivindicó en la memoria de las trayectorias profesionales que han construido prestigio y confianza durante décadas. El talento se vinculó al futuro de Andalucía, en la voz de los socios más jóvenes y en la mesa redonda sobre economía regional, donde se destacó el papel de Málaga como polo de inversión y centro de innovación. Y el compromiso apareció en las palabras de los socios directores, que insistieron en que esta unión está pensada para acompañar a los clientes a largo plazo, con cercanía local y vocación global.

El evento incluyó también una mesa redonda sobre la economía andaluza, que contó con la participación de José Luis Acea, Consejero Delegado de Banca March, Pedro Martos, Director de Banca Privada de Andalucía de Unicaja Banco y Juan Ignacio Zafra, Director territorial de Andalucía de CaixaBank. Los tres coincidieron en destacar el dinamismo actual de la región y el potencial de Málaga como polo de inversión y centro de referencia en el sector tecnológico.

La clausura corrió a cargo del alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, quien subrayó, con un tono bastante cómico que hizo reír a todo el auditorio, la importancia de la integración para el talento jurídico y empresarial de la región con ambición internacional. La diversidad de los invitados confirmó que la nueva etapa de la firma no concierne solo al ámbito jurídico: fue un acto de ciudad, respaldado por todas sus esferas —económica, cultural y social—.

El cierre de la gala recordó el verdadero sentido de esta integración: la unión de dos casas con trayectorias sólidas y complementarias. Montero Aramburu, fundado en Sevilla en 1971 como boutique tributaria, creció en los noventa hasta convertirse en un despacho multidisciplinar de referencia. Gómez-Villares & Atencia, con raíces en Málaga desde 1953, ha estado siempre estrechamente vinculado al tejido empresarial local con un sello cercano, familiar y, sobre todo, andaluz y para los andaluces.

Tras anunciar su integración en 2023, ambos despachos consolidan ahora su unión en una estructura de más de 370 profesionales, nueve sedes y una facturación de 30,3 millones de euros, que sitúa a la nueva firma entre las más relevantes de España. Un proyecto que tiene a Andalucía como punto de partida y al talento andaluz como motor de su futuro y que planea incluso expandirse al extranjero, como dejaron entrever en la gala.