La puesta a punto de los colegios cuesta 1,2 millones al Ayuntamiento

Después de las actuaciones realizadas durante los últimos meses en 81 colegios de Infantil y Primaria de la capital malagueña, los centros escolares "están a punto" para iniciar las clases este jueves, según afirmó ayer el portavoz del equipo de gobierno municipal, Mario Cortés. Pintura, arreglos de cuartos de baño, reparaciones de instalaciones eléctrica, vallado y adecuación de zonas de recreo suponen las intervenciones principales que los distritos han acometido y en las que este año se han invertido 1,2 millones de euros, un 37% más que el pasado año.

Los once distritos de la ciudad han llevado a cabo actuaciones en colegios, según las peticiones de la comunidad educativa y la disponibilidad presupuestaria. Desatoros, sustitución de zócalos, de grifos y cisternas, reparación del alumbrado exterior, de juntas de dilatación o bajantes y colocación de barandillas de seguridad son algunas de las más de ochenta actuaciones que se detallan en el informe presentado ayer por el Consistorio. Entre las actuaciones destacadas, la concejala de Educación, Gemma del Corral subrayó la demolición realizada de los edificios que oprimían la entrada al colegio Nuestra Señora de Gracia, en la Victoria.

"Había un proceso de expropiación de varios edificios con el propósito de ampliar la entrada y el patio de recreo y hacer un vallado perimetral del centro", explicó ayer Del Corral. "La obra de demolición se ha hecho por parte del Ayuntamiento y ahora corresponde a la Junta de Andalucía asumir la construcción del perímetro y el acondicionamiento del patio interior", agregó.

También apuntan que en colegios como el Severo Ochoa se han realizado actuaciones de mayor envergadura que el simple mantenimiento. En este centro se han renovado los aseos y el falso techo del aula matinal. En el CEIP Manolo Garvayo se han retirado dos cubiertas de fibrocemento y ocho depósitos de fibrocemento y en el Tartessos se ha demolido la escalera del patio y se ha construido una rampa de acceso, por citar algunos ejemplos.

La antigüedad de algunos centros, con más de seis décadas en ciertos casos, hace que las labores de mantenimiento sean más costosas. "Cambiar todo el baño sale más barato que reparar una y otra vez", dijo Cortés, que destacó que algunas piezas ya no se pueden sustituir porque ni siquiera se encuentran en el mercado. Y lo que piden desde el Consistorio a la Junta es que la inversión que destina a los centros se haga en función de las prioridades que marca la comunidad educativa de cada centro.

A estos 1,2 millones de euros en actuaciones, se suman las que habitualmente desarrolla el Consistorio a lo largo del año para la conservación y el mantenimiento de la actividad escolar, entre las que se incluyen los gastos de conserjería, así como en suministros de agua y luz, o los servicios de limpieza por parte de Limposam y Limasa, que en total, suponen un gasto superior a los 17 millones de euros.