El queso como base de originales y variados platos

La Quesería

La base de la carta son los quesos y en su variedad y su mezcla está la originalidad de sus platos. La Quesería de Málaga, sita en la calle Sánchez Pastor, lleva cinco años innovando en la elaboración de platos en los que el queso es el principal ingrediente. Aunque esto no quiere decir que sea el único plato que se puede degustar en el local, pues las carnes también gozan de aceptación entre la clientela.

Para los gourmets más especializados, La Quesería incluye en su carta la que llaman Selección de nuestros quesos, entre la que se encuentran los más conocidos y quizás también demandados, como el Manchego muy añejo y otros como El Gamoneu, catalogado como uno de los 7 mejores de España, al igual que el Payoyo -de la Sierra de Grazalema-. Y es que la calidad está por encima de cualquier otra consideración a la hora de seleccionar sus quesos y es por lo que la mayoría de ellos resultan casi desconocidos, además de ser de elaboración artesana. Otro ejemplo está en el queso Picón de Bejes-Treviso, considerado el mejor queso de pasta azul en 2007, un galardón que ha renovado todos los años hasta 2010. Por eso, es el personal del establecimiento el que aconseja a los clientes sobre la textura y sabor de estos manjares.

Quien se decante por la variedad, en la tabla de quesos está su mejor opción. Por 7 euros para 2 personas y 13 euros si es para 4, La Quesería propone una degustación de un surtido de quesos, que va variando cada cierto tiempo para dar la oportunidad a los comensales de experimentar con los sabores de distintos tipos de quesos.

Y en caliente, el queso fundido es otro de los atractivos de La Quesería. Las cazuelitas calientes las elaboran con diferentes variedades de queso fundido que acompañan de especias, embutidos e incluso con manzana verde. Por 4,40 euros está la de queso de Mahon con bacon y cebolla caramelizada con miel de caña, una de las más demandadas.

Aparte de los quesos, la recomendación de la casa es la presa ibérica con setas a la plancha, pero también disponen de patés, embutidos, carnes y ensaladas. Y para acompañar el queso o cualquier otra de sus variedades, una completa selección de vinos, en la que los tintos son los adquieren una mayor importancia.

En los postres, la variedad pasa por la tarta de queso Philadelphia y por el queso fresco de cabra de Málaga con confitura de frambuesa. Como curiosidad, en la carta de entrantes hay un plato que los comensales piden tanto de aperitivo como de postre. Se trata del queso fresco de cabra a la plancha con miel de caña, un plato malagueño que ellos han recuperado -5,75 euros-.