"Me ratifico en mis declaraciones ante el fiscal"

El denominado caso Piscinas, en el que un juzgado de Málaga investiga un posible delito de cohecho en la adjudicación de la concesión de la piscina de Puerto de la Torre, podría sufrir un nuevo giro de tuerca el próximo 4 de abril. Será ese día cuando el empresario Antonio López Belda, cuyo testimonio ha permitido poner sobre la mesa supuestas anomalías en la explotación de este equipamiento deportivo, preste declaración ante el titular del juzgado número 14 en calidad de testigo. Este promotor, que inicialmente formó parte de la unión de empresas que se hizo con la concesión de la piscina, confirmó a este periódico que ratificará ante el juez la declaración formal que realizó ante la Fiscalía el pasado 22 de noviembre.

Según pudo conocer este periódico, la Fiscalía, tras solicitar la apertura de diligencias judiciales para aclarar este asunto, remitió en su momento una petición al Juzgado Decano de Málaga para solicitar al juez que finalmente se hiciera cargo de la investigación que llamase a declarar nuevamente al empresario que denunció los hechos. El Ministerio Público, según fuentes judiciales, quería así asegurarse de que el denunciante se ratificaba en los testimonios que en su momento formuló. La Fiscalía solicita, además, al juez que si de la declaración se dedujese la posible existencia de algún delito también se llame a declarar a los presuntos imputados.

En la declaración de López Belda ante el fiscal, a la que tuvo acceso Málaga hoy, se señala, entre otros detalles, que tuvo conocimiento del concurso para la adjudicación de la piscina "a través de su amigo Manuel Díaz Guirado, que le animó a presentarse" y que como carecía de capacidad económica para llevar a cabo el proyecto "en solitario", el edil "le presentó a Enrique Vega quien a su vez le presentó a Augusto Parody, administrador de Incomar Blue, y ambos le proponen formar una UTE", que posteriormente optó en solitario al procedimiento.