Resuelto el misterio del 'Virus Málaga': Bernardo Quintero encuentra al autor 33 años después

Bernardo Quintero ha conseguido cerrar una historia que comenzó hace más de tres décadas, cuando un vírus "puso en jaque" los laboratorios de la Universidad de Málaga. El creador de VirusTotal volvió a dar inicio a la búsqueda del autor de este, tras intentarlo por primera vez en su época de estudiante, cuando apareció por primera vez, así como hace unos años cuando retomó esta investigación. Y ha descubierto a su autor.

Hace un par de semanas puso un mensaje en LinkedIn explicando el caso, contextualizándolo y haciendo dicho llamamiento. Y encontró al creador, que había acabado trabajando de profesor de Informatica en Torre del Mar, Antonio Astorga, aunque este había fallecido. Sin embargo, Quintero pudo reunirse con uno de sus hijos, que se encuentra siguiendo los pasos del padre, que acaba de finalizar los mismos estudios. Poniéndo fin a este capítulo y conociando con esto algo más a la persona que sin saberlo "despertó una vocación que definiría toda mi carrera", subraya Quintero.

Tras lanzar el mensaje en su perfil, volvió a sumergirse en el código del virus, por si se hubiera pasado por alto alguna señal del autor. "Recuerdo que entonces me enfoqué casi exclusivamente en entender cómo infectaba para poder detectar y desinfectar. Poco más", apunta. Por lo que comenzó a analizarlo, byte a byte.

Y descubrió algo que no había visto hasta el momento. Cuando se cumplía una condición específica: año 1992 o superior y día 1 de cualquier mes, se activaba una rutina, a la que al restar 100 e imprimirlos, aparecía dos líneas con un mensaje contra ETA. Dando así con el playload, lo que describe como "efecto" del virus.

Aunque la pista definitiva que le llevó al autor de este fue por algo "mucho más sutil": dos bytes, 4B 49 (que en ASCII es "KI"). Su análisis le llevó a concluir que esto era una especie de firma del creador. Ahora bien, estas letras, KI, había que descubrir a qué correspondían, si era una marca, o las propias iniciales del autor.

Compartió estos datos con otro estudiante de la Politécnica de Málaga, que al darle los resultados de sus propias investigaciones, vio que cada uno tenía una versión diferente del mismo virus. Y haciendo una búsqueda a través de VirusTotal (su base de datos de malware), encontró la variante de su compañero. Y ahí, le llegó entre los bytes el mensaje "KIKESOYYO". Pista que redujo a los posibles creadores, pues ahora tenía un nombre. A la vez, Quintero recibió el mensaje de un antiguo compañero de la universidad, que afirmaba que él había sido amigo del autor.

Y le dio el nombre, Antonio Astorga, pero también le dijo que este había fallecido. En ese momento Quintero dice que sintió un "jarro de agua fría", pues ya no podría hacerle preguntas sobre este virus. Y había otra pieza que no le cuadraba, ¿por qué Kike?

Tiró del hilo, descubriendo que Astorga trabajó en un instituto de Torre del Mar, el IES Miraya, donde fue profesor de Informática. Dio con la hermana del autor, a la que le explicó su investigación y los fines de estos, que principalmente era conocer al creador del Virus Málaga. Tras charlar con ella, le preguntó de dónde venía Kike, y esta le descubrió que su hermano tenía un nombre compuesto, y el segundo era Enrique, Kike.

También le dijo que uno de los hijos de Antonio Enrique Astorga acababa de terminar sus estudios en Informática en la UMA, Sergio, con el que se puso en contacto. Y se conocieron en persona. Quintero relata que con ese encuentro conoció mejor a Kike, "un colega brillante que se merece ser reconocido como un pionero de la ciberseguridad en Málaga". También volvió a destacar la importancia que tuvo ese episodio en su vida, que despertó "una vocación que definiría toda mi carrera". Afirma que Sergio y él seguirán viéndose, así como que coincidirán "más de lo que pensamos.