La reurbanización del centro alcanza a Puerta Nueva, Cárcer y Casapalma

El modelo de reurbanización impulsado hace ya más de una década en el centro histórico de Málaga pasará a integrar este verano tres nuevas localizaciones: Puerta Nueva, Cárcer y Casapalma. Para ello, la Gerencia de Urbanismo acaba de licitar la contratación de las obras en estos puntos del casco antiguo por poco más de 1,2 millones de euros, de los cuales el 80% son financiados mediante fondos europeos, con cargo al programa Iniciativa Urbana Málaga 2007-2013).

De ellos, 885.000 (incluido el IVA) se corresponden con la intervención planteada en las calles Cárcer y Casapalma, cuyo plazo de ejecución es de cinco meses. La propuesta de actuación diseñada por los técnicos municipales "trata de peatonalizar en la mayor medida posible" ambas vías, "dejando un uso restringido para el tráfico rodado". Con esta operación se busca dar continuidad a la unión desde la Plaza Uncibay hasta el Teatro Cervantes "mediante un eje de naranjos en la margen izquierda".

El proyecto, al que tuvo acceso este periódico, contempla la delimitación de las zonas peatonales con mármol crema, dejando la Sierra Elvira para regularizar encuentros y para la zona de tráfico. Asimismo, se prevé una franja en mármol rojo travertino con el fin de marcar el trazado de la antigua muralla medieval. Este eje urbano, según el análisis técnico, se encuentra "en estado deficiente de conservación", razón por la que se incide en la necesidad de actuar sobre el mismo. Al margen de la sustitución del pavimento, se acometerá la sustitución de las redes de servicios urbanos existentes, por otros nuevos de mejores características y adaptados a las actuales normativas.

La naturaleza de la iniciativa es semejante en el caso de Puerta Nueva, punto que tiene carácter de calle rodada aunque sin salida para el tráfico. Esta obra se valora en 345.560 euros (IVA incluido) con un plazo de cuatro meses desde la firma del acta de replanteo. En buena medida, la zona es usada para el estacionamiento de motos y ciclomotores, plazas que se verán afectadas con la obra, así como para la carga-descarga hacia el centro. El plan de intervención fija la necesidad de realizar investigaciones arqueológicas de acuerdo con lo exigible por la Conserjería de Cultura. En cuanto a servicios se proyecta la renovación de las redes de agua y alcantarillado dentro de la zona de actuación, igualmente la renovación de pavimentos de calzadas y aceras. Se definen y valoran asimismo las obras correspondientes al riego y ajardinamiento de alcorques.

Una vez impulsadas ambas intervenciones urbanas, Urbanismo tiene pendiente únicamente la mejora del entorno de Atarazanas, obra que se quiere financiar con el sobrante del plan de reurbanización del entorno de la Catedral.