Una ruta cervecera por Málaga

Lo dice la Biblia: "Dad la cerveza al desfallecido y el vino a los de amargo ánimo". Lo dijo Plinio I, cuando afirmaba que los hispanos eran conocidos por ser "grandes bebedores de cerveza de gran calidad". Y también ciertas tradiciones monacales, que aseguraban que los monjes debían beber litro y medio de cerveza al día y medio litro las monjas, porque también se consideraba alimento. Ahora, lo dicen ocho restaurantes de alta cocina malagueña, que se han unido con la publicación Excelente para realizar la II Semana Excelente de Cerveza, que empieza el próximo lunes y pretende "impulsar el maridaje entre esta bebida y la alta gastronomía", según explicaron ayer sus responsables.

"La idea es demostrar que la cerveza también puede ir ligada a la cocina de calidad", añadieron las mismas fuentes, que indicaron también que otro de los fines es conseguir el impulso turístico de Málaga "también de alta gastronomía". Los establecimientos que realizan esta iniciativa son Amador, Café de París, Herrero del Puerto, Limonar 40, Manducare, Montana y Palo Cortado. Todos han compuesto un menú distinto de entre tres y cuatro platos además del postre, siendo todos ellos acompañados con las distintas cervezas del Grupo Mahou-San Miguel. El precio único por persona será de 45 euros.

"Hay que tener en cuenta que la cerveza es perfectamente combinable con las verduras, con los pescados azules, con los quesos fuertes, el alioli...", añadía el historiador gastronómico Fernando Rivera, que se preguntaba "¿Qué sería de un buen espeto sin una caña?".

Por último, Miguel de Hayo, responsable de Marketing en San Miguel, presentó la última cerveza del grupo: Selecta. Se trata de una cerveza con más alcohol (6,2 grados), con la malta más tostada y con mayor tiempo de maduración en bodega, según explicó.