El salón de juegos Pause & Play del Centro Comercial Vialia que estaba clausurado preventivamente por la Policía autonómica, asegura que el menor "entró valiéndose de la identidad de otra persona mayor de edad, hecho que consta en el acta policial". Desde la empresa aseguran que son “los primeros que no quieren que entren menores ni autoprohibidos en nuestros locales”, asegura Isabel Fernández, directiva de Grupo Vid, que ellos se sienten "estafados por el menor" y que creen en "la responsabilidad corporativa", si bien "resulta muy complicado cuando alguien hace un uso fraudulento de una documentación oficial como es el DNI y consigue engañar con estos métodos a los sistemas y al personal del control de acceso del establecimiento".

La sala, que ha vuelto a abrir este miércoles, asegura que el menor "estuvo exactamente 13 segundos sin identificar y en ningún momento llegó a jugar dentro del establecimiento" ya que la policía "entró casi al mismo tiempo" en el local de juego.

La Junta de Andalucía endureció en diciembre de 2019 las sanciones a los salones de juego, cambiando la infracción por permitir la entrada a menores o a autoprohibidos de grave a muy grave, lo que implica multas que oscilan entre los 10.001 y los 300.000 euros además de estas medidas cautelares de cierres provisionales.

Este decreto se aprobó con el consenso de todos los agentes implicados buscando conseguir el equilibrio entre la libertad de empresa y un juego responsable y sostenible.