El terral volvió ayer a hacer sudar a los malagueños. La capital fue el municipio de la provincia que más calor soportó ya que los termómetros llegaron a marcar una temperatura máxima de 37,2 grados, la segunda más alta en lo que va de verano después de los 37,4 grados que se alcanzaron el domingo. Pero la entrada del viento de levante hará que las temperaturas bajen hoy de golpe hasta nueve grados.

La Agencia Estatal de Meteorología advirtió de que el temido viento de terral volvería ayer a mostrar su peor cara en algunos puntos del litoral malagueño y activó la alerta amarilla en previsión de que se superaran los umbrales máximos.

Y así fue. Las temperaturas se mantuvieron altas durante todo el día ya que la mínima registrada ayer en Málaga capital se situó en los 23,1 grados.

El Servicio Andaluz de Salud activó también el dispositivo previsto en estos casos para vigilar a la población de riesgo por un posible golpe de calor. Los mayores de 65 años, las personas con problemas respiratorios y los niños son los colectivos más frágiles ante la subida brusca de las temperaturas.

Las enfermeras de enlace de los centros de salud intensificaron ayer el seguimiento mediante contacto telefónico sobre los 733 mayores de 65 años de la provincia de Málaga más propensos a sufrir un golpe de calor. Evitar la exposición al sol en las horas centrales del día y mantener una buena hidratación son algunas de las recomendaciones.

Pero la situación cambiará hoy radicalmente. La entrada del viento de levante hará que las temperaturas bajen de golpe unos nueve grados en Málaga capital, mientras que en el interior subirán ligeramente.

La Agencia Estatal de Meteorología prevé que esta repentina bajada de las temperaturas favorezca la aparición de brumas y posibles bancos de niebla durante la mañana en el litoral. La temperatura máxima prevista para hoy es de 28 grados, mientras que la mínima será de 21.