La situación de inseguridad que los vecinos de Palma-Palmilla consideran estar viviendo les ha llevado a elaborar un escrito que ya ha sido remitido a la subdelegada del Gobierno en Málaga, María Gámez, para advertirle de la frecuencia con la que se vienen registrando incidentes con armas de fuego en la barriada. Y no solo “entre bandas rivales”, recoge el escrito, al que ha tenido acceso este periódico, sino también “entre vecinos por diferentes disputas".

Aunque la mayoría de los casos están relacionados con el “menudeo de drogas”, la casuística es variada. Los tiroteos registrados durante el pasado 2018 se han producido, según los vecinos, “hasta por celos de parejas, pasando por pura diversión”. Ocurren, principalmente, por la “dejadez y abandono de las instituciones en la barriada de Palma-Palmilla”, reza el comunicado, que fue remitido el pasado 21 de enero, poco después de que transcendieran dos tiroteos, que aunque se saldaron sin heridos ocasionaron daños materiales.

Los vecinos solicitan mantener una reunión con todas las partes responsables en materia de seguridad, caso de la subdelegada del Gobierno, el jefe de la Comisaría de Policía Nacional del distrito norte, el fiscal jede de la Audiencia Provincial de Málaga, el concejal del distrito de Palma-Palmilla y el director. La idea del colectivo vecinal es abordar el asunto y conocer qué medidas tiene previstas adoptar tanto el Cuerpo Nacional de Policía como la Subdelegación del Gobierno y la Fiscalía.

Afirman que los incidentes se producen entre bandas rivales y entre vecinos por disputas

En el escrito, los residentes recuerdan que desde hace unos años vienen advirtiendo a los responsables políticos de la violencia en el barrio, que ya se cobró la vida de una persona. El origen fue “una reyerta entre dos vecinos por la disputa de la venta de un vehículo”. Los disparos entre ambos individuos provocaron que una bala terminara alcanzando a una joven madre, vecina del barrio, el 16 de mayo de 2008. Un proyectil alcanzó en el cuello a la mujer cuando venía de comprar y se disponía a entrar en su portal. Hubo entonces una manifestación convocada por los vecinos para mostrar su repulsa por los hechos.