"El trabajo me hace sentir una persona válida"

"El trabajo me hace sentir una persona válida". La frase fue corta, pero contundente. Era la respuesta que Rocío Fernández, discapacitada de 25 años, dio a los periodistas cuando le preguntaron lo que suponía para ella su empleo en Asprodisis Ronda. Ayer, cerca de 200 personas -la mayoría discapacitadas- se manifestaron ante la Delegación del Gobierno de la Junta para exigirle el pago de las subvenciones que adeuda a los centros especiales de empleo de la provincia. Los retrasos se remontan en algún caso hasta el último cuatrimestre de 2013.

Hubo bocinazos, pancartas y pitos. Parecía una protesta más. "¿Dónde está nuestro dinero?", "Susana, paga esta semana", coreaban los manifestantes. Pero la movilización tenía un matiz diferente: eran personas con discapacidad manifestándose por sus empleos. "Los impagos de la Junta ponen a los centros especiales de empleo al borde de la quiebra y a estos chicos prácticamente en el paro y sin alternativa", reflexionaba el presidente de Aceema (la asociación que agrupa a estas empresas), Alfonso Rubio.

Allí estaba también Jacinto Gómez, camarero en Aspromanis desde hace seis años. Su salario le ha permitido independizarse, aunque vive en la casa contigua a la de su hermana. Este hombre de 47 años contaba que disfruta de su trabajo y que participaba en la concentración para defender "mi sueldo". Y estaba Ana Bueno, de 34 años, que limpia coches en Aspromanis. Explicaba que sus ingresos sirven a la familia "para pagar" gastos. La provincia cuenta con 71 centros especiales de empleo que dan trabajo a unas 2.200 personas con discapacidad. Desde hace casi dos años, las empresas no cobran la parte de las nóminas que cubre la Junta y que asciende a 300 euros mensuales por empleado. Sin embargo, los centros deben abonar la totalidad del salario, lo que compromete su viabilidad.

"Nosotros tenemos un atraso en el pago de las subvenciones desde el último cuatrimestre de 2013. Hemos aguantado hasta ahora con recursos del centro especial de empleo, pero ya este mes no podemos pagar las nóminas. El colchón se ha agotado", advirtió Francisco Aguilar, de Amivel, de Vélez. La protesta comenzó sobre las 12:00. Media hora más tarde, se sumaron los manifestantes de las escuelas de hostelería que también querían trasladar su malestar ante la sede autonómica. Así, sobre las 13:00, la concentración frente al edificio de la Alameda Principal rondaba las 400 personas.

José Antonio Vera, monitor de jardinería en Adipa Antequera, de 32 años, también participaba en la protesta de los centros especiales de empleo. "Estoy aquí porque estos retrasos son muy injustos. Es muy duro que personas con discapacidad se vean en esta situación. Son empresas que intentan la inclusión, es algo que nos pertenece", argumentaba.

José Antonio Pérez, responsable de Aspromanis Campillos, advertía que "los centros van a empezar a cerrar porque su situación económica es insostenible". Y añadía: "Venimos aquí para abogar por sus derechos. Ellos están trabajando y tienen que cobrar".

Ayer, a última hora de la mañana, los delegados del Gobierno andaluz en Málaga, José Luis Ruiz Espejo, y de Empleo, Francisca Montiel, recibieron a los directivos de Aceema. Ambos representantes de la Administración autonómica les transmitieron la voluntad de abonar las ayudas pendientes de 2014. Algunas de estas subvenciones todavía están pendientes de resolución, trámite previo imprescindible para que sean abonadas. "Dicen que lo están tramitando por la vía de urgencia. Tiene gracia, porque son de 2014. Además, nos han prometido el pago, pero nosotros seguimos sin cobrar", se quejó el presidente de la asociación.

Dentro de las movilizaciones, los centros especiales de empleo de toda Andalucía prevén una marcha que partirá el domingo a las 11:00 de Antequera y que acabará siete días más tarde en Sevilla. Allí, protagonizarán otra concentración, esta vez, ante el Palacio de San Telmo, sede de la presidencia de la Junta de Andalucía.

La protesta de ayer se prolongó hasta casi las 15:00. A esa hora, los concentrados se fueron disolviendo. Pero Rocío había dejado una reflexión para quien quisiera escucharla: "Vivo con mi madre, pero tengo en mente independizarme, tener mis hijos y llevar una vida normal. Porque tengamos una pequeña diferencia no somos bichos raros. Todo el mundo es discapacitado, en mi opinión".

Emitido el 60% de las resoluciones

La Junta de Andalucía informó ayer que ya se ha emitido más del 60% de las resoluciones correspondientes a 2014 y que en la próxima semana se culminará el proceso. Una vez que los centros reciban las resoluciones provisionales, dispondrán de 10 días para validarlas y a continuación se le enviarán las definitivas. La Administración indica además que dispone de una partida de 3,6 millones de euros y que la próxima semana habrá por parte del Servicio Andaluz de Empleo una ampliación del crédito para completar los pagos. Está previsto que el abono "pueda estar finalizado antes de final de año". La Junta reiteró su compromiso con la labor de los centros especiales de empleo y el mantenimiento de sus puestos de trabajo e indicó que trabaja para "una mayor y mejor integración laboral y social" de las personas con discapacidad.