Estuvo lloviendo durante toda la madrugada pero en cuestión de una hora se armó el caos en Málaga. Apenas habían pasado unos minutos de las 9:00 de la mañana cuando una impresionante tromba de agua descargó con toda su fuerza sobre la capital dejando viviendas, locales y garajes inundados, algunas personas atrapadas en sus vehículos y calles intransitables en numerosos puntos de la ciudad debido a la saturación que sufrieron los sistemas de alcantarillado. Los 50 litros por metro cuadrado que cayeron en tan sólo una hora desbordaron todas las previsiones y los servicios de emergencia no daban abasto para atender las casi un centenar de incidencias que provocaron en tan poco tiempo.

Aunque hacía varias horas que había amanecido, el cielo se tornó de pronto en un gris plomizo que hizo presagiar lo peor. Ni la propia Agencia Estatal de Meteorología advirtió el peligro que corrió la capital con el paso de ese frente lluvioso hasta que ya fue tarde. Fuentes de la Subdelegación del Gobierno en Málaga reconocieron que no se llegó a emitir ningún aviso de alerta por el riesgo de lluvias porque no se esperaba que lloviera tan fuerte.

Pero al final sí llovió y mucho. Tanto que zonas como Pedregalejo, Dos Hermanas y los polígonos industriales cercanos al aeropuerto de la ciudad quedaron prácticamente inundados. El Ayuntamiento de Málaga se vio obligado a desplegar todos los servicios municipales para hacer frente a las numerosas incidencias provocadas por la lluvia.

Los bomberos de la capital realizaron 45 salidas entre las 8:45 de la mañana de ayer y las 14:00 de la tarde. Aunque el servicio de emergencias del 112 recibió un total de 150 avisos sólo en Málaga y Alhaurín de la Torre, la mayoría solamente en la hora en la que cayó la fuerte tromba de agua.

Plantas bajas inundadas, árboles caídos y coches aislados en las balsas de agua que había formado la lluvia en numerosas calles movilizó a un amplio dispositivo municipal que tuvo que incluso rescatar a los ocupantes de varios vehículos que habían quedado atrapados.

El sistema de alcantarillado de la ciudad no estuvo a la altura de las circunstancias, según denunció ayer el grupo municipal socialista en el Ayuntamiento de Málaga, que culpó al "déficit" en su limpieza el "colapso" que se produjo en la ciudad. El portavoz del PSOE, Rafael Fuentes, criticó la "constante externalización" que "lleva a cabo el PP" en el Consistorio, lo que en su opinión "contribuye a la merma de la calidad de los servicios prestados, que después sufren todos los malagueños".

El Ayuntamiento, en cambio, mantuvo que todo funcionó con normalidad y que las actuaciones realizadas por el dispositivo especial puesto en marcha por la Empresa Municipal de aguas (Emasa) en distintos puntos de la ciudad respondió a las demandas ciudadanas por los problemas derivados de las intensas lluvias durante todo el día.

Los puntos más conflictivos fueron las zonas de El Palo, la avenida Europa, Huelin, Las Delicias y Churriana. Las alcantarillas reventaron en muchos casos y el agua les llegó a las rodillas a los viandantes que a esa hora pasaban por el entorno de la calle Hilera.

Para evitar mayores riesgos, el Ayuntamiento asegura que los operarios de Limasa también estuvieron retirando durante toda la mañana los residuos que se acumularon sobre las rejillas del alcantarillado público para favorecer la evacuación de aguas a la red de pluviales de la ciudad.

La acumulación de agua obligó a la Policía Local a cortar el tráfico en algunos tramos de Ortega y Gasset, calle Bolivia, avenida Jenofontes, en un carril auxiliar de Avenida de Andalucía y en la zona de García Morato.

También se produjeron pequeños desprendimientos de tierra que afectaron a la calle Meridiana y a otras vías de Cerrado de Calderón, Ciudad Jardín y el Limonar.

Además, el centro de salud de Carlinda tuvo que ser cerrado por culpa de la lluvia y los cerca de 200 pacientes que estaban citadas ayer fueron derivados al centro de Miraflores. El distrito sanitario confiaba en que hoy se reanude la actividad normal.

Aunque en el interior de la provincia no llovió con tanta intensidad, el agua afectó a parte de las vías del tren entre Campillos y Ronda. Renfe tuvo que interrumpir el servicio durante casi cinco horas y trasladar a los pasajeros de dos trenes por carretera.

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