La última gran lluvia de estrellas de 2024: ¿se podrán ver las gemínidas desde Málaga?
En su día de mayor actividad podrían observarse hasta 150 estrellas fugaces por hora
Llega el invierno a Málaga: la Aemet prevé frío y lluvias
El 2024 está en su recta final y en menos de tres semanas se dará la bienvenida al 2025. Antes del nuevo año tendrá lugar la última gran lluvia de estrellas, las gemínidas. Esta lluvia de meteoros será visible desde todo el hemisferio norte, hasta el 17 de diciembre aproximadamente. Por lo que podrá observarse desde Málaga. Su momento de mayor actividad será en la noche del viernes 13 al 14 de diciembre, sobre las 2 de la madrugada. El Instituto Geográfico Nacional (IGN) ha subrayado que podrán observarse en este tramo hasta 150 estrellas fugaces por hora.
Sin embargo, no podrán verse en todo su esplendor, el IGN ha destacado que el momento de mayor actividad coincide con la noche siguiente a la luna llena. Este astro iluminará en gran medida el cielo nocturno, por lo que serán visibles aquellos meteoros que sean más brillantes.
¿Desde dónde observar la lluvia de estrellas en Málaga?
Los apasionados de la astronomía de Málaga deben de tener en cuenta que esta semana la previsión es de lluvias y nubes. Aunque el mismo viernes remitirán, por el momento se esperan cielos nubosos para el sábado (aunque solo en intervalos).
Como en otras ocasiones, es importante situarse en un lugar oscuro y donde no se tenga obstáculos (como edificios, árboles o montañas). Desde el IGN aconsejan posicionarse en la dirección opuesta a la situación de la luna, y de este modo colocarse en la zona más oscura del cielo. En esta ocasión bastante importante teniendo en cuenta que el momento en el que mejor podrán observarse coincide con el segundo día de luna llena.
¿Cuál es el origen de la lluvia de las gemínidas?
El IGN señala que el origen de las gemínidas "fue un misterio durante siglos", ya que no se había podido asociar esta lluvia de estrellas con ningún cometa. Hasta el año 1983, cuando el telescopio espacial de infrarrojos IRAS (lanzado por la NASA) identificó un asteroide, llamado Faetón, y al estudiar su órbita, se descubrió que este asteroide era el que causaba la lluvia de meteoros. Y así se le pudo dar un origen a las gemínidas.
Los astrónomos especulan con la idea de que Faetón pudiese ser hoy un cometa extinto y que los fragmentos que forman las gemínidas pudiesen haber sido desprendidos hace siglos, cuando Faetón aún tenía actividad cometaria. Como todos los años por estas fechas, la Tierra atraviesa un anillo poblado con aquellos fragmentos desprendidos de Faetón. Cuando uno de esos fragmentos (o meteoroides) entra en contacto con la atmósfera terrestre, se calcina por la fricción con el aire creando así el resplandor luminoso que conocemos como meteoro o estrella fugaz. Los meteoros más comunes que pueden observarse a simple vista los producen partículas de unos milímetros a unos centímetros de tamaño que se queman a unos 100 kilómetros de altura.
También te puede interesar
Lo último
El parqué
Avances moderados
Tribuna Económica
Fernando Faces
Estrategias de vivienda: de resolución a confrontación
La tribuna
Merecimientos
La colmena
Magdalena Trillo
Noah