Un soplo de aire solidario entre el barro y los muebles deshechos por la huella implacable de la borrasca Gloria. Mientras avanzan las tareas de limpieza en el interior de las casas y el registro de los daños dejados tras la inundación, vecinos de todos los puntos de la ciudad atienden la llamada realizada por el distrito de Campanillas, en colaboración con varias asociaciones del barrio, así como Cáritas y Osah, aportando su particular grano de arena. Lo hacen, fundamentalmente, en forma de mantas, ropa de cama y abrigo, así como de productos de limpieza.

En las pocas horas que pasan desde la puesta en marcha de la iniciativa, activada a las 09:00 de ayer, "se ha podido llenar ya un almacén entero". Así lo expresa agradecida la concejala del distrito, Ruth Sarabia, quien pone en valor no sólo el gesto solidario de las cerca de 200 personas que han acudido para dejar estos enseres, sino también de los voluntarios que participan en la recogida de los mismos. Según expone, lo hacen en turnos de ocho cooperantes, de 08:00 a las 20:00.

Las últimas cifras elevan ya a casi 800 las familias que han acudido a la oficina instalada por el Consistorio en el distrito para registrar los daños causados tras las inundaciones ocurridas en la madrugada del pasado sábado. Recogida toda esta documentación, será remitida al Consorcio de Seguros para su análisis y estudio. Según ha insistido el alcalde, Francisco de la Torre, el compromiso de este organismo es el de responder con rapidez a las reclamaciones. El regidor ha confirmado que del orden del 5% de los peticionarios carecen de seguro, lo que dificulta de manera clara el que puedan ser compensados por los daños. Es por ello que ha insistido en que el Gobierno central disponga de las ayudas necesarias para atender a estos perjudicados.