Adrián González anunció su retirada del fútbol como jugador profesional al mismo tiempo que habría la puerta de su nuevo presente en los banquillos. El que fuera capitán del Málaga CF, tras sus últimas experiencias en Zaragoza y Fuenlabrada, decidió tomar un nuevo rumbo en su carrera después de 451 encuentros oficiales entre Primera y Segunda División.

Ahora ya está en Grecia, donde forma parte del cuerpo técnico de su padre, Míchel, en el Olympiacos, donde han llegado recientemente. Vuelven a coincidir ambos en un club, pero por primera vez su primogénito no es su futbolista. Adrián jugó más de 100 partidos con el Málaga, en los que consiguió 20 goles y llegó a ser el capitán.

"Hay que mirar siempre adelante y buscar nuevos retos. Seguiré estando sobre el césped pero esta vez en una posición distinta a la de jugador. En estos 16 años como jugador profesional he disfrutado muchísimo. Mirando atrás estoy orgulloso de lo que he logrado. Algo que ha superado mi sueño de niño. Ahora solo con unos días perteneciendo a un cuerpo técnico, ya sé, que voy a seguir disfrutando igual", compartió en su cuenta de Instagram.