Después de acabar su segunda etapa en el Málaga CF, poco fructuosa tanto en el sentido individual como en el colectivo, Alfred Ndiaye estaba sin equipo desde que en el mes de junio acabara su vinculación con el club. Tuvo varios episodios chuscos en su segunda etapa en el Málaga y su estado físico dejó mucho que desear en ese tiempo, lejos del jugador más dominante que era años atrás. Llegó a desaparecer unas horas cuando estaba convocado para entrenar provocando una situación delicada que finalmente se resolvió.

Ahora, el senegalés ha encontrado un destino no muy frecuente para futbolistas de alto nivel. Se trata de FC Noah, equipo de Armenia y que dirige un entrenador español, Carlos Inarejos. Marcha segundo en la competición doméstica y en la plantilla hay más de una decena de nacionalidades distintas en el equipo ubicado en Ereván, la capital del país. Como curiosidad, el nombre está relacionado con el relato bíblico del arca de Noé, que se ubicó en el Monte Ararat, en la frontera entre Turquía, Irán y Armenia. Un destino que a sus 33 años indica de manera evidente el declive en la carrera de Ndiaye, que ya estuvo varios años previamente en la Liga de Arabia Saudí.

Lumor, de Grecia a Austria

Otro jugador que formó parte de la plantilla, de mal recuerdo porque consumó el descenso, del año pasado del Málaga y que ha encontrado destino en el mercado invernal es Lumor Agbenyenu, que estaba en el AE Kifisias griego y ahora firma por el SV Ried de la segunda división de Austria. Fue un jugador que llegó estando libre para cubrir el lateral izquierdo en la etapa de Pepe Mel pero que su rendimiento fue malo, de hecho se le rescindió el contrato en marzo después de varios episodios de indisciplina y viajes extraños a su país.