Joaquín al frente de la tropa 'viola'

La Fiorentina aglutina una pléyade de buenos nombres y futbolistas de categoría, pero al malaguismo no le dará más alegría verlo que Joaquín. Huelga decir que será ovacionado por La Rosaleda. Estuvo dos años en Málaga y dejó una huella indeleble, en el imaginario se le vinculará siempre a la época dorada. No estará enfrente su compinche Jesús Gámez, colega de banda y fuera del campo, pero queda todavía gente de su época. Y los recuerdos de sus quiebros por la banda, sus aceleraciones y sus goles, que metió unos cuantos simbólicos. Como el que tumbó al heptacampeón de Europa, el Milan.

Vivirá Joaquín dos días consecutivos de homenaje y reconocimiento. Hoy su equipo juega en Málaga y mañana en el campo del club de su vida, el Betis. Nunca ocultó que quiere acabar en Heliópolis su carrera. Se habló en Sevilla de su hipotética vuelta este mismo verano para devolver por segunda vez al Betis a Primera. Ya lo hizo en la temporada 2000/01, la de su irrupción en la élite del fútbol. Pero el sueldo que percibe Joaquín en Florencia resulta prohibitivo para el Betis o para el propio Málaga, que él de buena gana se hubiera quedado aquí por lo que percibía. Joaquín conserva su casa en la Costa del Sol y ha pasado un trecho importante de sus vacaciones en ella. Se le pudo ver en una mesa redonda que organizó el club en el 110 aniversario de los inicios del balompié en la ciudad y estuvo rebosante de simpatía. La campaña pasada no fue titular indiscutible pero sí tuvo mucho protagonismo. Jugó 37 partidos oficiales, con cinco goles y siete asistencias. Su tanto en la remontada histórica liguera ante la Juventus, rival más odiado, le dio plaza en el santoral viola.

Junto a Joaquín viene Iakovenko, cedido sin pena ni gloria la pasada temporada. El que no, El Hamdaoui, en la rampa de salida. Pertenece al equipo pero está fuera de la disciplina. La entidad toscana ha realizado una gira por Brasil y Perú y totaliza seis encuentros. El Calcio empieza el 30 de agosto, queda una semana más de preparación. Vienen 27 jugadores a las órdenes de Montella. Entre ellos Cuadrado, del que se habla y no para sobre su fichaje por el Barcelona. También Mario Gómez, Pepito Rossi, Borja Valero, Marcos Alonso, cuyo padre entrenara al Málaga... Un equipazo digno de Champions.