Mediada la primera parte, Luca Sangalli debió retirarse del partido entre el Málaga CF y el Castellón. "El jugador ha sido sustituido por unas molestias en los músculos isquiotibiales de su pierna izquierda. Queda pendiente de evolución", decía el club en una primera valoración. Por los gestos de dolor, físico y moral, y por las lágrimas que tenía el jugador donostiarra no tenía buena pinta. Había regresado con el Año Nuevo en el partido ante el Intercity tras perderse nueve encuentros a causa de una rotura en el gemelo interno de su pierna derecha, que se complicó. Tres partido, el de la Real y el del Ceuta, ha durado sano el guipuzcoano, que no está teniendo suerte esta temporada con las lesiones cuando debía ser un jugador estructural en los planes de Sergio Pellicer por su jerarquía y trayectoria. 

En los próximos días se la harán más pruebas a Sangalli para ver el alcance, aunque vuelve a haber un boquete gordo en el centro del campo con la reciente lesión de Juanpe, que también ha tenido ya varias lesiones. Los resultados después de fastidiarse en un entrenamiento esta semana reflejan una lesión muscular en el bíceps femoral de su pierna derecha y la entidad de la Costa del Sol confirmó que no podía jugar ante el actual líder de la categoría de bronce del fútbol español y afirmó que queda pendiente de evolución, pero sin dar un plazo de baja estimado para su regreso a la disciplina de la plantilla de Sergio Pellicer y volver a abandonar la enfermería blanquiazul.

Con la sempiterna ausencia de Ramón, vuelve a quedar el centro del campo corto de efectivos, aunque se recuperará a Genaro la próxima semana una vez cumplidos los cuatro partidos de sanción por la roja que vio en los vestuarios del encuentro ante el Algeciras.