Cuando todo el mundo apunta a las dos áreas, el Málaga tiene una obsesión: acertar con los centrales. Así de claro. La entidad entiende que esta posición es fundamental en la actual Segunda División y que no le sirve cualquiera. Y se dice en plural porque en principio se quiere contratar a dos defensas para dotar de mayor solidez a la plantilla de José Alberto López.

Se busca un central de garantías, contundente y con capacidad de liderazgo. A ser posible, buen conocedor de la categoría. El otro defensa no tiene por qué ser un central puro y la dirección deportiva entiende que lo mejor sería alguien polivalente, capaz de jugar de central pero también en alguna otra posición.

Ya lo publicó este medio hace semanas, el Málaga volverá a apostar por los jugadores versátiles en muchos casos porque aunque la situación ha mejorado, el equipo tiene muchas limitaciones y necesita poder contar con alternativas. Lo confirmó el mismo José Alberto cuando analizaba a Brandon Thomas, que entra dentro de ese perfil de hombres capaces de actuar en dos o tres posiciones de manera decente.

Volviendo a la cuestión de la defensa, el primer equipo cuenta con dos centrales fijos como el capitán David Lombán y Juande. Mejías acabó su cesión con los blanquiazules y ha terminado dejando un importante vacío. El venezolano empezó dejando dudas pero terminó (cuando las lesiones no se lo impidieron) cuajando un segundo tramo de temporada espectacular. Rápido, contundente, con buena salida de balón, expeditivo... Salvo algún exceso corregible y evitable, el vinotinto jugó bien. Pero no sólo eso, fue fundamental para que funcionase el 4-1-4-1 de Pellicer con el que se cimentó la permanencia.

Precisamente a partir de ahí se entendió que tanto Escassi como Luis Muñoz son más importantes en el centro del campo que en la zaga. El primero parecía que no podía falta de la defensa hasta que se quedó con la zona ancha casi para él solito. En el caso del segundo, ha demostrado que mientras más cerca esté del área rival, mejor. ¿Podrían ser centrales ocasionales? Por supuesto. También Ismael Casas. Pero no es la idea original, que pasa por fichar a un par de centrales.

En la cantera hay chicos interesantes. Casi todos los ojos apuntan al juvenil Andrés Caro, una de las mayores promesas de La Academia. De momento, está en la pretemporada bajo la supervisión de José Alberto López, pero está en una edad en la que necesita minutos y progresar. Nadie se quiere precipitar con él.