El Málaga CF ha cerrado el fichaje de Unai Bustinza (Bilbao, 1992) que llega libre tras desvincularse del Leganés. El defensor, de 30 años, tiene una dilatada trayectoria en tanto como central como lateral diestro, y llega para aportar ese plus de veteranía, experiencia y polivalencia a la zaga blanquiazul. El vasco firma por tres temporadas, hasta 2025.

Las negociaciones con Bustinza fueron sencillas. El jugador estuvo muy receptivo ante la propuesta blanquiazul y sólo restó la rescisión de su contrato con el Leganés, donde le restaba un año de contrato pero donde los muchos cambios vividos en el club pepinero (nuevo dueño y nuevo entrenador) le dejaban sin sitio. Las últimas siete temporadas del bilbaíno fueron en Butarque, donde ha disputado 161 partidos, 100 en Primera y 45 en Segunda, siendo los restantes de Copa del Rey. Estos le despidieron como una leyenda del club, realzando de él su capacidad de mando como capitán y su profesionalidad durante estos años.

Bustinza se formó en Lezama, en las categorías inferiores del Athletic de Bilbao, con el que llegó a debutar en Primera en 2014. Desde el descenso del Leganés a Segunda, el vasco perdió protagonismo en el equipo pese a su capitanía. Esta última campaña sólo disputó 12 partidos de Liga y dos de Copa del Rey, rozando los 800 minutos y jugando más de central. En la anterior, 18 de Liga y uno de Copa para más de 1.200 minutos de juego y la mayoría como lateral.

El bilbaíno llega para cubrir dos posiciones delicadas, tanto la de lateral diestro como la de central. La salida de Ismael Casas y la vuelta de Víctor Gómez al Espanyol deja a Iván Calero como único lateral diestro actualmente en plantilla. Bustinza puede ocupar esa posición y la de central, donde por el momento estarán Juande y el comodín Escassi, así como algún canterano como Andrés Caro. Peybernes, del que se desea su salida, parece querer continuar.