El entrenador del Málaga Sergio Pellicer está muy satisfecho con las cuatro jornadas de entrenamiento a pesar de que se han producido en condiciones especiales. El técnico reconoce que en las dos últimas jornadas ha subido el listón, asume que habrá lesiones y ya ha programado el miércoles como primer día de descanso para el plantel con el objetivo de no sobrecargar en exceso a los futbolistas. Todo esto lo confesó en una entrevista a Radio Marca.

"Es una vuelta a la normalidad con mucho entre comillas. Estamos muy felices por volvernos a encontrar. Son circunstancias extrañas en los métodos de entrenamiento, pero empezamos a andar, a tener sensaciones positivas y los jugadores tienen sensaciones después de pasar tantos días en su casa. Pueden ejercer su profesión, pueden pisar el verde, tocar balón, hacer ejercicios y aclimatarse de una manera individual. Estamos muy satisfechos de estos primeros cuatro días, hemos visto cosas muy positivas. Tenemos a la gente sana. Mañana daremos día de descanso para que vuelvan a recuperar. Hay que hilar muy fino, tenemos el riesgo de lesión de los jugadores. Hemos aumentado la carga en estas dos últimas sesiones, la gente lo ha absorbido muy bien", explicó.

Preguntado por si ha tenido alguna negativa en la plantilla de volver al trabajo como el Cádiz con Fali, el preparador lo negó y fue compresivo : "Tenemos que ser muy respetuosos con cada decisión, en este caso con Fali. Cada uno tiene un miedo y cada uno tiene que intentar superarlo en su situación. Nos encontramos un grupo que sabe la responsabilidad que tiene y saben que cualquiera nos podemos contagiar y transmitirlo a su familia. Pero el grupo cumple todos los protocolos de seguridad, saben lo que tienen que hacer, está claro que ellos tienen que ir a casa y seguir funcionando igual. Salir y hacer su trabajo en La Rosaleda es su profesión, pero luego tiene que seguir teniendo la responsabilidad que tuvieron los 60 días anteriores", dijo y añadió: "Hemos tenido que parar a algunos jugadores ne las tareas porque tienen muchas ganas. Es un juego bonito y los futbolistas también son privilegiados porque disfrutan de su profesión. Tenemos que ir paso a paso para poder competir y hay que mirar día a día. Tenemos la experiencia de que antes de empezar a entrenar nos han cambiado el escenario no sé cuántas veces. Trabajaremos día a día, fase por fase y llegar a competir en las mejores condiciones posibles".

Pellicer explicó que el aspecto táctico ha sido uno de los que más se han trabajado telemáticamente durante la cuarentena y que, línea a línea, se han ido repasando puntos básicos y más complejos en el juego del equipo. De cara a la vuelta de la competición, prevé partidos con más goles y resalta el aspecto anímico como capital: "La clave son los tres o cuatro primeros partidos. Como llegue el equipo, no por el tema físico, sino por el tema mental. Eso hace mucho por todo lo que hemos vivido. Dependiendo de que equipo o rival, qué perfil de jugadores... Habrá goles, por la mentalidad, la concentración, los estadios vacíos, por todo lo que lleva la nueva situación. La clave son los tres o cuatro primeros partidos, eso nos marcará una hoja de ruta a nivel mental y a nivel de creer que se puede disfrutar de la competición o si habrá que sufrir. Aunque aquí se disfruta poco. No será el primer partido, serán los cuatro primeros. El que pueda conseguir ahí un buen número de puntos tendrá mucho avanzado por el nivel mental y lo que conlleva a nivel de dinámica".

Nuevas reglas y canteranos

En lo referente a que existan más cambios y cómo puede afectar eso a la exigua plantilla profesional del Málaga, Pellicer fue claro: "Será como hasta ahora, lo único que parece que cambiarán las normas, 23 convocados, cinco cambios. Todo eso que se dice tenemos que superarlo con mentalidad ganadora, somos la plantilla que tenemos, a partir de ahí, nuestra idea es clara: como sin van 25 y hay diez cambios. Tenemos que superarlo con mentalidad ganadora, no quejarnos de nada, ser valientes, trabajar con humildad pero ser valientes y aceptar los retos con optimismo, entrega y pasión. No debemos quejarnos de nada, tenemos que estar preparados para jugar mañana mismo. Todo lo que sea quejarse y ver que podemos salir perjudicados por algo es perder partidos. Hay que ser valientes, todo se supera con trabajo, mucha humildad y siendo valientes. Trataremos de hilar bien los cambios, ajustar todas las situaciones, pero seguiremos igual".

"Tenemos 30 jugadores, previniendo las lesiones, para poder trabajar en grupos en la fase 3, preparando cualquier situación que nos pueda surgir por licencias y por competitividad entre ellos. Tenemos una cierta ventaja de haber estado abajo, que los hemos visto con jugadores de su nivel y con jugadores de arriba. Vemos ese rendimiento, nos da esa situación a nivel individual y colectivo, hay que intentar equivocarse lo menos posible, son gente con humildad, hambre y condiciones. Deben tener hambre de mejorar y que ante cualquier obstáculo tenga mentalidad ganadora, sobre todo en esta sociedad de gente joven que se lo encuentra todo hecho, a veces le damos una alfombra roja a la gente joven y hay un obstáculo y no lo supera. Hay que tener mentalidad. Queremos tenerlos preparados para poder competir", explicó en Radio Marca sobre las cualidades de los filiales que trabajan con el primer equipo.

Por último, en entrenador malaguista quiso mandar un mensaje a la afición: "El grupo está responsabilizado, sabemos lo que nos jugamos todos. Trabajamos con humildad y si empieza la competición, trataremos de dar la alegría aunque sea virtual. Que la gente sepa que el equipo está responsabilizado y que iremos con la mayor ilusión posible".