Y por fin Juanpi volvió a ser Juanpi. Le ha costado encontrarse, pero a confianza insistente de Sergio Pellicer ha terminado dando sus frutos. El canterano, el hombre que más tiempo lleva en la plantilla del actual Málaga, venía haciendo cada mejores actuaciones y también mostrando una capacidad de sacrificio que no se veía desde que le entrenaba Javi Gracia. El golazo al Alcorcón, justo en el momento que más falta hacía al equipo y al club, puede suponer un antes y un después.

"Liberado porque no sé cuánto tiempo llevaba sin marcar un gol. En estos últimos partidos estaba en buena dinámica y cada vez estaba un poco más cerca de marcar. Esa sensación de volver a marcar un gol en casa, sin gente, pero bueno, ha servido para la victoria y la salvación", declara un Juanpi feliz pero extenuado después de esta casi interminable temporada.

“Demasiado sufrimiento durante todo el año. Hemos sufrido de más. Hemos vivido muchísimas cosas que nos han podido distraer de más y por fin se ha acabado. Objetivo cumplido. Aún queda un partido más, pero sí es para pensarse las cosas para el año que viene y gestionar las cosas de una manera que sea para el beneficio del club y de los jugadores”, asegura el vinotinto.

Juanpi se quiso acordar de las otras personas que conforman un club de fútbol y también las que están más cercanas: “De toda la gente que siempre ha estado ahí. Hemos sufrido muchísimo, hay demasiado sacrificio dentro que no se ve y que solo lo vemos quienes estamos dentro. Nos acordamos de toda la gente que está en las malas”.