La Junta reactivará la formación en el CIO Mijas en noviembre
Saca a licitación la reforma de los aularios para retomar la actividad el próximo trimestre
Mijas/Noviembre es la fecha estimada por la Junta de Andalucía para reanudar la actividad del Centro de Formación Integral de las Industrias del Ocio (CIO) de Mijas tras más de cuatro años en los que el edificio ha estado completamente abandonado. Así lo anunció este jueves la consejera de Empleo, Formación y Trabajo Autónomo de la Junta de Andalucía, Rocío Blanco, durante una conferencia en los desayunos informativos Encuentros ABC en Málaga, donde aseguró que la idea es iniciar la formación “cuanto antes”. Por ello, detalló que ya se ha sacado a licitación la reforma de la parte de los aularios y formación donde tendrán lugar las clases para que “a primeros de noviembre pueda estar abierto para hacer una formación reglada”.
Aunque no se precisó cuáles serán esos primeros cursos, un informe de la propia Consejería del pasado mes de junio publicado por este medio recogía que dicho plan formativo “consistiría en una formación profesional para el empleo conducente a la obtención de Certificados de Profesionalidad de nivel 3”. Y, más concretamente, señalaba que las acciones formativas para la reapertura serían la recepción, la promoción turística local e información al visitante, la sumillería, las competencias claves y la docencia para la formación profesional para el empleo.
Una vez que se retome la actividad formativa del CIOMijas el siguiente paso será, según apuntó este jueves Blanco, la puesta en marcha del hotel Calamijas, que fue construido con una categoría de cuatro ellas y cuenta con 180 habitaciones, un restaurante y un gimnasio, así como de la residencia de estudiantes. “Queremos hacer una formación en alternancia, dual, de forma que la empresa que lo esté explotando deje una serie de plazas para que los alumnos puedan realizar esa formación en el hotel”, apuntó durante su intervención, tras lo que agregó que “el CIOMijas es un emblema, un proyecto precioso que queremos que se concrete”.
Cabe recordar que la residencia de estudiantes fue precisamente uno de los edificios más afectados por el abandono al que se ha visto sometido todos estos años, llegando a ser ocupado hasta en varias ocasiones que causaron destrozos en su interior. A este respecto, la Junta de Andalucía había reservado una partida en los presupuestos de este año de 364.936 euros para acometer las mejoras oportunas en las instalaciones del CIOMijas con vistas a retomar su actividad en el último trimestre del año.
Estas obras contemplaban no solo la mejora de la zona formativa del centro sino también de las zonas comunes, la revisión del alumbrado y actuaciones en elevadores, activación de las instalaciones de refrigeración y calefacción, puesta a en funcionamiento del sistema de control centralizado de las instalaciones y reparación del control domótico y otras actuaciones complementarias, como la reposición de hitos publicitarios, pintado o desmontaje de estructuras antiguas. El centro permanece sin actividad desde el año 2014 y, aunque en mayo del año pasado se firmó un acuerdo con la Universidad de Málaga (UMA) para retomar su actividad formativa, poco se sabe de aquel convenio de colaboración de intenciones del que no había nada fijado.
Un centro de referencia nacional en el olvido
Por este resort de la formación, considerado centro de referencia nacional, han pasado cerca de 3.000 alumnos y otros 2.600 en cursos para desempleados hasta que todo empezó a torcerse. En sus 40.000 metros cuadrados de superficie cuenta con una residencia de estudiantes, pistas deportivas, piscina y hasta un hotel catalogado con cuatro estrellas, el Calamijas, Este también acabó echando el cierre en noviembre del año 2014, con la actividad formativa paralizada, la residencia de estudiantes vacía y la baja ocupación propia de esa época del año. El edificio fue inaugurado a bombo y platillo en el año 2006 tras una inversión de 40 millones de euros procedentes de fondos europeos. Hasta que en 2014 todo eso se acabó. Aunque sin duda los que peor lo pasaron fueron los cinco empelados públicos a los que en tres años se les llegaron a adeudar casi 40 nóminas sin cobrar. No fue hasta la integración de los trabajadores en el Servicio Andaluz de Empleo (SAE)cuando estos volverían a cobrar sus nóminas cada mes. Mientras que el proceso para su reapertura parece dilatarse en el tiempo. Hasta la fecha, la Junta se había limitado a instalar cámaras de videovigilancia para evitar nuevos actos vandálicos y realizar tareas de desbroce en un centro que llegó a ser referencia nacional.
También te puede interesar
Lo último