Tragedia familiar en Mijas. Dos personas han muerto, una de ellas por disparos. De las primeras pesquisas se desprende que un hombre ha matado a tiros a otro después de que haya sido encontrado el cadáver de su padre, del que no se tenía noticias desde hacía una semana, según han confirmado fuentes de la Guardia Civil, que este martes había desplegado un amplio dispositivo de búsqueda para tratar de localizar al desaparecido. El cuerpo sin vida ha sido descubierto en una arqueta, aunque todavía no ha sido confirmado cuál fue la causa del óbito.

Pasadas las 18:00 de la tarde, el Servicio de Emergencias Sanitarias 112 Andalucía recibía una llamada en la que se solicitaba asistencia urgente porque un hombre había sido disparado, en la barriada de Molino del Viento. Tras tener conocimiento, el centro coordinador desplegó un dispositivo formado por agentes de la Policía Local y de la Guardia Civil. También se dio aviso a los sanitarios.

El autor podría haber empleado una escopeta para perpetrar el crimen, según han afirmado fuentes próximas consultadas por Málaga Hoy. Fuentes cercanas a la investigación han asegurado a Efe que sus familiares, acampados en un cañaveral junto al río Fuengirola, han empezado a gritar tras conocer el hallazgo del cadáver, han salido corriendo, han localizado en una casa cercana de la misma barriada a quien creen responsable de la muerte y habrían acabado con su vida.

Los disparos han sido oídos en las inmediaciones, según las fuentes, que indican que las dos personas fallecidas y el arrestado tenían en común residir en la misma barriada. Unas imágenes de vídeo de un establecimiento de la zona captaron en el área del cañaveral al desaparecido y al vecino que ha resultado muerto de dos disparos.

La Guardia Civil se ha hecho cargo de la investigación a fin de esclarecer el caso. Así, fuentes del instituto armado han confirmado que momentos después de que fuese hallado sin vida el cuerpo del desaparecido, se detuvo a uno de los hijos del fallecido como presunto autor de la muerte del vecino.

Hacía casi una semana que la familia no sabía nada de Raúl Heredia, de 41 años y padre de cuatro hijos, al que se perdió la pista el pasado 24 de julio. Este martes se había desplegado un amplio dispositivo de búsqueda, con la participación de submarinistas, drones, un helicóptero y perros para tratar de localizarlo. La alerta por su desaparición la dieron este pasado lunes sus familiares a través de la asociación SOS Desaparecidos.

Entre las autoridades que mantenían el dispositivo de búsqueda había preocupación ante la posibilidad de que, fuese cual fuese el desenlace, pudiera acabar en una disputa violenta entre la familia del desaparecido y la de persona que lo acompañaba la última vez que fue visto. El día en el que se presume que Heredia desapareció no se encontraba solo, sino que estaba acompañado por uno de sus primos, según Efe.

La Guardia Civil trabaja, por tanto, con una doble línea de investigación. De un lado, habrá que aclarar las circunstancias que rodearon la muerte de hombre al que se le había perdido la pista para confirmar o descartar la participación de terceras personas. Aún no ha trascendido si el cadáver presenta signos de violencia. Las pesquisas, además, permitirán conocer qué llevó al hijo del finado a acabar con la vida de otro y la relación que guarda con él.

Las cámaras de videovigilancia de un establecimiento comercial de Mijas situaban al desaparecido en una zona de cañaveral junto al río Fuengirola, lugar donde también se había encontrado una de las zapatillas que llevaba puestas cuando su familia lo vio por última vez. Ahí, en el entorno del río los hijos, los hermanos y un nutrido grupo de familiares, algunos residentes en otros municipios de la Costa del Sol, habían acampado para seguir de cerca la búsqueda de la Guardia Civil.

Una bala perdida en un tiroteo en un parking de Estepona deja un herido

Es el segundo incidente con arma de fuego que las fuerzas y cuerpos de seguridad investigan en apenas tres semanas. El último, que se saldó con un herido, ocurrió en los aparcamientos de un supermercado en Estepona. Según informaron entonces fuentes policiales, la víctima, que recibió un impacto de bala, no tenía nada que ver con el suceso. La Policía Nacional hablaba entonces de "enfrentamiento armado" en el que se estaba indagando.

Sucedió en la zona de Isdabe, en el aparcamiento de un supermercado situado junto a la A-7 (antigua N-340) en la zona de Atalaya, en la parte oriental del municipio. Allí, los ocupantes de dos vehículos habrían protagonizado la confrontación. Varios testigos alertaron de numerosas detonaciones en el parking y la presencia de una persona que había resultado herida. Esta información movilizó a la Policía Nacional y a los sanitarios, que atendieron al herido y lo trasladaron a un centro sanitario con una herida en un brazo.

Hasta el lugar se desplazaron agentes del Cuerpo Nacional de Policía para acordonar el lugar e iniciar las investigaciones pertinentes. La vida del herido no corría peligro ya que el disparo le había alcanzado únicamente el brazo.