Un grupo de expertos en Derechos Humanos de la ONU ha denunciado las torturas, las desapariciones forzosas y las detenciones arbitrarias sufridas por manifestantes sirios a manos de las autoridades y sus fuerzas de seguridad, que además han usado una fuerza excesiva contra quienes han protestado contra el Gobierno y para pedir democracia.

Estos expertos han vuelto a pedir "el fin inmediato de las violentas estrategias adoptadas por el Gobierno para acallar las manifestaciones", según se lee en un comunicado difundido por el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos.

El Ejército sirio volvió a bombardear con sus carros de combate la ciudad de Hama (oeste del país) ayer, según han informado un residente y varios activistas . El asalto, con el que el Ejecutivo pretende acabar con las protestas, comenzó el pasado domingo.

Habitantes de la ciudad han dicho que temen que el número de muertos, desde el domingo, supere los 135, una cifra que se había dado como estimación. Según Estados Unidos, los ataques perpetrados por las fuerzas sirias desde que comenzaron las manifestaciones antigubernamentales, el pasado marzo, han dejado unos 2.000 muertos.

"Seguimos recibiendo informaciones sobre el uso sistemático de una fuerza excesiva que ha causado muertes y heridas; sobre las torturas, las desapariciones forzosas y las detenciones arbitrarias sufridas por manifestantes; ataques contra defensores de los Derechos Humanos y restricciones injustificadas de la libertad de reunión y de expresión", afirmaron.

El relator especial sobre ejecuciones extrajudiciales, sumarias o arbitrarias, Christof Heyns, ha subrayado que "el uso indiscriminado de artillería pesada contra manifestantes no se puede justificar, ya que a ningún Estado le está permitido usar su fuerza militar contra una población civil desarmada, independientemente de la situación". "Las muertes son, claramente, ejecuciones arbitrarias, que se pueden castigar según el Derecho Internacional", ha añadido.

Sobre la tortura, el relator especial encargado de esta cuestión, Juan Méndez, ha señalado que "Siria ha ignorado todas las normas internacionales contra la tortura y los malos tratos y sigue haciéndolo". "Sus dirigentes deben poner fin a estos actos inmediatamente y enterarse de que van a rendir cuentas por lo que han hecho", ha advertido.

El relator y presidente del Grupo de Trabajo sobre desapariciones forzosas o involuntarias, Jeremy Sarkin, ha dicho que "éstas no se pueden justificar en ninguna circunstancia y que ningún Estado debe practicarlas, permitirlas o tolerarlas".

Por su parte, el relator y presidente del Grupo de Trabajo sobre Detenciones Arbitrarias, El Hadji Malick Sow, ha instado a las autoridades sirias a "liberar a todas las personas que han sido arrestadas arbitrariamente por participar en manifestaciones pacíficas o por expresar opiniones distintas".

En cuanto a la libertad de reunión y asociación, Maina Kiai, el experto de la ONU, ha recordado que "el derecho a manifestarse pacíficamente es fundamental en cualquier sociedad democrática."