El Ayuntamiento da luz verde al Museo del Patrimonio Industrial

Muchos malagueños se preguntan qué piensan hacer con las enormes fábricas que dejaron de funcionar hace años en el área de Huelin. Otros piensan que la mejor manera de deshacerse de estas edificaciones viejas y enormes es demoliéndolas para poder aprovechar el espacio que ocupan. Pero muy pocos se detienen a pensar en la historia que estas construcciones albergan y lo que representan sus enormes chimeneas.

Ayer, el delegado municipal de Cultura, Miguel Briones Artacho, junto al presidente de la Asociación de Vecinos Torrijos de Huelin, Francisco Moya, y el portavoz de IU, Pedro Moreno Brenes, presentaron la moción que dictaminará la creación del Museo del Patrimonio Industrial del que formarán parte las fábricas de la costa oeste de Málaga. Esta iniciativa, que será aprobada el próximo jueves 30 de julio por la Comisión del Pleno, le da la oportunidad al movimiento obrero de saltar al mundo del arte, ya que "en las obras de arte siempre han figurado personas de la realeza, de la burguesía y la nobleza, pero nunca los obreros", añadió Briones.

El pasado industrial de Málaga queda plasmado a través de estos edificios que durante años sirvieron de soporte manufacturero y potencia de desarrollo. Estas viejas fábricas se encargarán de recordarle a todos los malagueños el trabajo de sus obreros, algunos de ellos continúan viviendo cerca de ellas y seguramente la creación de este museo les supondrá una gran satisfacción. "La belleza de las chimeneas y las fábricas formadas por el trabajo de las manos de nuestros obreros, que aportaron tanto a nuestra ciudad no puede quedar al margen", afirmó el delegado.

Las construcciones aún conservan algunas maquinarias antiguas que evocan la época de esplendor industrial de la provincia y dentro de ellas todavía se puede recrear el trabajo de los obreros que hicieron posible el desarrollo social y cultural de Málaga, algo digno de valorizar.