El Consejo Asesor de la Bienal de Flamenco de Sevilla ha distinguido con los premios Giraldillo, correspondientes a su XIX edición, que concluyó el pasado día 2, a la cantaora Marina Heredia, a la bailaora malagueño Rocío Molina y al guitarrista Vicente Amigo.

Según informó la dirección de la Bienal, su Consejo Asesor, integrado por críticos y profesionales del flamenco, el Giraldillo para el mejor espectáculo de la Bienal ha sido para Catedral, de la bailaora y coreógrafa Patricia Guerrero.

El Giraldillo a la Innovación ha correspondido al espectáculo Diálogos de viajeros y nuevos sones, de Fahmi Alqhai y Rocío Márquez, y el Giraldillo Revelación para la cantaora María Terremoto. El Giraldillo Ciudad de Sevilla ha sido para el espectáculo Bailando una vida, dirigido por Rubén Olmo, y el Giraldillo al Momento Mágico para el cantaor José Valencia por su evocación del maestro Juan Peña El Lebrijano en el espectáculo De Sevilla a Cádiz. El Giraldillo del Jurado recayó por su parte en el cuerpo de baile del Ballet Flamenco de Andalucía.

Entre el 8 de septiembre y el 2 de octubre, la Bienal puso en escena 66 espectáculos distintos con 70 funciones en ocho escenarios distintos, y casi la totalidad de ellas vendieron todo su aforo.

Con este Giraldillo, la malagueña Rocío Molina, que presentará el próximo domingo en el Teatro Cervantes su espectáculo Afectos, creado junto a Rosario La Tremendita, se adjudica un nuevo éxito en la Bienal de Sevilla, certamen del que es asidua.