Exposición Pedro de Mena

El regreso del hijo pródigo

  • Más de un centenar de obras del imaginero Pedro de Mena se reunirán en Málaga a partir del próximo sábado en las salas del Palacio Episcopal

Organizadores, autoridades y patrocinadores, en el coro de la Catedral.

Organizadores, autoridades y patrocinadores, en el coro de la Catedral. / M. H.

La legendaria figura de Pedro de Mena cuenta con una doble visión en la ciudad de Málaga: por una parte, la que su apellido marca a la Congregación de la Buena Muerte con sus avatares históricos tras la quema, indicada por el profesor Jiménez Guerrero, en los sucesos de mayo de 1931. Por otra, la de su obra extendida como objetivo de la devoción entre un centenar de imágenes. Desde la recoleta calle Afligidos, donde se encuentran su monumento y la casa donde vivió, hasta la cercana y monumental Catedral, su arte se concentrará en una exposición monográfica de más de 100 piezas que abrirá el próximo sábado en el Centro de Arte Palacio Episcopal y se prolongará hasta mediados de julio.

Pedro de Mena: Granatensis malacae es el nombre elegido para congregar una representación de la imaginería religiosa del escultor del siglo XVII. Para poder albergar esta muestra, el Obispado de Málaga suspendió tras la exposición de Eugenio Chicano su actividad habitual con el fin de adaptar el espacio por completo, incluyendo la exposición permanente que actualmente se puede contemplar en el interior de la Catedral. El primer templo de la ciudad fue elegido como escenario para la presentación de esta muestra, en uno de sus lugares emblemáticos: la sillería del coro en la que intervino el artista granadino.

En el Palacio Episcopal se podrán contemplar 63 esculturas de Pedro de Mena, además de dos reproducciones del Cristo de la Buena Muerte y la Virgen de Belén, desaparecidas en la parroquia de Santo Domingo durante la quema de conventos de 1931. Dos de los principales atractivos de la misma serán las imágenes de la Magdalena penitente, perteneciente al Museo del Prado pero depositada en el Museo Nacional de Escultura de Valladolid, y el San Francisco de Asís de la Catedral de Toledo, que estarán ubicados con especial dedicación en las salas expositivas.

La exposición se estructura en varias secciones según lo dispuesto por el equipo artístico presidido por Miguel Ángel Gamero, responsable diocesano de Patrimonio: Identidad; Amigo y protector (dedicada a fray Alonso de Santo Tomás); Inmaculada Concepción; Maternidad e infancia de Jesús; Pasión de Cristo y Ejemplos de Santidad. Junto a las obras de los últimos días de vida de Jesucristo, los organizadores destacan la presencia de imágenes con gestos afables, cariñosos y maternales del Niño Jesús solo o acompañado de la Virgen María o San José. El resto de obras forman parte de la sillería del coro de la Catedral, realizado por el imaginero entre 1658 y 1660.

De todas las esculturas, una cuarta parte han sido restauradas por el equipo de conservación del Palacio Episcopal, lo que ha permitido modificar una de las premisas sobre la obra de Mena que más se habían difundido: el autor granadino no colocaba a sus esculturas colores lisos en las túnicas de la Virgen y de los santos, ni en el manto de San José. Estas intervenciones se podrán apreciar en piezas como el Cristo del Perdón y la Virgen Dolorosa de la Catedral de Málaga, el San José con el Niño del convento de las Carmelitas Descalzas de Madrid o las dos versiones de la Inmaculada Concepción que se conservan en el Seminario y el Palacio Episcopal, que procede del antiguo convento del Císter.

Junto a la exposición, los responsables diocesanos tienen prevista la celebración de un ciclo de conferencias titulado “Las tardes de Pedro de Mena”. Entre los conferenciantes se encuentran Lázaro Gila Medina, catedrático de Historia del Arte de la Universidad de Granada; José Luis Romero Torres, historiador del Arte y Conservador del Patrimonio Histórico de la Junta de Andalucía, o Juan Antonio Sánchez López, catedrático de Historia del Arte de la Universidad de Málaga.

La muestra sobre Pedro de Mena cuenta con el patrocinio del Ayuntamiento y la Diputación de Málaga, Unicaja Banco y su Fundación. A ellos se suman, entre otros colaboradores, la Junta de Andalucía, la comunidad de Madrid o la fundación Abadía del Sacromonte.

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