También en el puerto de Málaga, al este de la pastilla de terreno que iba a acoger una de las insignias culturales del siglo XXI de la ciudad, su ansiado auditorio, se perfila otro sueño que quizás tenga una mejor suerte. Aunque aún con todo por decidir y más de un pretendiente al acecho, el alcalde de Málaga ya ha movido ficha para que los promotores del Hermitage en Barcelona traigan el proyecto a la capital de la Costa del Sol. El regidor ha reconocido un primer encuentro y la voluntad de continuar con las negociaciones si, finalmente, se decantan por esta sede como franquicia del museo ruso tras los problemas de ubicación suscitados en la capital catalana.

Sin embargo, De la Torre no las tiene todas consigo. Mientras él considera que “puede hacerse”, la concejala de Cultura, Noelia Losada (Cs), estima que “no es el momento”. Sea como fuere, ya hay otra pieza con la que jugar en el tablero de la ciudad de los museos. Otro espacio que seguiría alimentando el ansia del Gobierno municipal de perpetuar el distintivo cultural junto al nombre de la capital que hace algunas décadas no vendía mucho más que sol y playa.

Según confirmaba ayer De la Torre, la ciudad “está abierta” a hacer realidad esta nueva infraestructura, que estaría situada frente al mar, y aseguraba que “si los promotores está decididos e interesados, la operación puede hacerse”.

En cuanto a posibles futuras reuniones sobre este proyecto, una vez iniciados los contactos, el alcalde explicó que a corto plazo no hay ninguna prevista pero que está “abierto a esos encuentros”. “Se quedó en que cuando ellos tuvieran las ideas más maduras, más claras y definitivas, habría contacto”, dijo ayer De la Torre. Subrayó, además, que “en paralelo deben tener contacto, que me parece que lo han tenido, a nivel portuario”.

“Hemos tenido una primera reunión y nosotros hemos mostrado también disponibilidad porque ha habido más ciudades, por lo que se ve, no sé si contacto de ellos hacia las ciudades o al revés”, detalló De la Torre. No obstante, insistió en que, en cualquier caso, “nosotros estamos abiertos al tema en la línea de esa estrategia de Málaga de ser fuerte en cultura”.

Edificio proyectado por el arquitecto Toyo Ito para el de Barcelona.

También confirmó que se abordó la posible ubicación del espacio cultural, precisando que comentó dos posibilidades: “Ellos parece que están más orientados hacia la ubicación portuaria, en la zona de la plataforma de San Andrés, en el espacio situado al este de la parcela que tenemos reservada para el auditorio”.

Pero una cosa es tener un suelo medianamente disponible que pueda ser del agrado de los promotores y otra muy distinta, la capacidad para que se materialice la operación. De la Torre, aunque asegura no tener los datos suficientes como para hablar con seguridad sobre ello, insiste en que “la operación puede hacerse”. La concejala de Cultura, no obstante, cree que “no es el momento”.

“Málaga ya tiene consolidado por derecho propio el sello de Ciudad de los Museos. Destinamos mucho presupuesto a ello. Ahora necesitamos multiplicar la inversión en patrimonio”, apuntó ayer Losada. A su juicio, “no necesitamos nuevos museos, necesitamos una rehabilitación de la Alcazaba y Gibralfaro y seguir haciendo excavaciones en el monumento; realizar las excavaciones del Cerro del Villar; debemos plantearnos la necesidad de conservar la Catedral; necesitamos volcarnos en la arqueología; en los Astilleros Nereo; en la parcela del Astoria y Victoria”.

Además, la portavoz de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Málaga recordó que se acaba de “renovar hasta 2035 el convenio con el Museo Ruso de San Petersburgo y el Centre Pompidou estará al menos en nuestra ciudad hasta 2025”. Esto supone una inyección de capital considerable. “Málaga ha invertido 14 millones de euros en prorrogar su presencia en la ciudad. Ambos museos, junto con el Picasso, el Museo de Málaga, el Thyssen o la Casa Natal configuran una oferta de extraordinaria calidad. Es una gran señal que el Hermitage se plantee venir a Málaga. Pero quizás no es el momento”, concluyó.

Para el alcalde, “todo lo que sea reforzar la potencia de lo que ya existe o nuevos equipamientos siempre es bueno para Málaga, cuya estrategia en esa línea entendemos que ha sido un éxito como elemento motor de la estrategia en paralelo de ser una ciudad innovadora, capaz de atraer talento”.

Este pasado domingo saltó a la prensa nacional el conflicto entre la sociedad Museo Hermitage Barcelona, que desde mayo tenía licencia del Puerto para el proyecto, y el Ayuntamiento de la Ciudad Condal. Dada la negativa del Consistorio, ya se hablaba de nuevas sedes para el centro de exposiciones. Madrid y Sevilla, entre ellas. Ambas capitales son las que han realizado propuestas más concretas para intentar captar una inversión prevista de 52 millones de euros y cuya puesta en marcha podría atraer a 850.000 visitantes en sus primeros doce meses.

“Supongo que están haciendo un análisis de cierta profundidad del tema. Desde el punto de vista del espacio y de las normas que tenemos previstas en ese Plan Especial del Puerto para esa parcela, si fuera en esa parcela, es viable; había otra, la gemela de la Comisaría Central de la Policía Nacional, que también fue comentada, pero en principio están más mirando a la parcela portuaria”, detalló ayer el alcalde de Málaga, al que nunca le faltaron aspiraciones en materia cultural. Ya tiene otra nueva.