No hubo que esperar mucho. Con apenas cinco minutos de retraso sobre el horario anunciado comparecieron en el escenario del Auditorio Municipal los componentes de El Canto del Loco que se encontraron con un recinto completamente lleno y con ganas, muchas ganas, de ver a sus ídolos. Un público mayoritariamente adolescente se entregó desde el primer minuto al buen hacer de Dani Martín y su grupo que no escatimaron esfuerzos, ni olvidaron ninguno de sus temas más sonados, coreados con pasión por los asistentes, entre los que también podían verse a parejas jóvenes con sus hijos que ya disfrutaban de su primer concierto en directo, muchos de ellos sin haber cumplido aún la decena de años.

No se guardó nada Dani Martín que trufó de referencias malagueñas sus comentarios entre canción y canción para terminar de ganarse el favor de un público que ya llegaba al espectáculo con pocas ganas de ser exigente con sus ídolos.

El grupo madrileño celebró anoche un concierto apoteósico, de lo mejor del verano, dentro de su gira Hasta luego y delante de más de 13.000 espectadores. El público acudió en masa para deleitarse con estos chicos para los que no parece haber objetivo imposible.

El concierto sirvió de presentación para su disco De Personas a Personas, una reedición del anterior álbum y contó en todo momento con la entrega y la complicidad con el público. Todos, en las gradas y frente al escenario vibraron con pasión y no dejaron de bailar ni cantar un momento.

Este grupo que se fundó en 1994, no publicó su primer disco, El Canto del Loco, hasta el año 2000, aunque desde entonces no han parado de cosechar éxitos. Pasaron de tocar en locales pequeños a ser producidos por Alejo Stivel, y de ahí a ser nominados este mismo año a los MTV Europe Music Awards como Mejor artista español, y aunque en esta ocasión no se lo llevaron, en sus dos siguientes nominaciones, en el 2003 y en 2005, si que se alzaron con el galardón.

Aunque hayan sido criticados por hacer un sonido comercial y ser los ídolos de las quinceañeras, han creado un sonido inconfundible y cada vez más maduro con lo que cada vez más aumentan sus seguidores y el margen de edad de estos (que aunque no lo parezca hay muchos hombres que siguen a este grupo). Así, además de agotar las entradas en la capital malagueña engancharon al público desde el principio hasta el final.