El cantante australiano Nick Cave y su banda, The Bad Seeds, han enloquecido al auditorio del festival Cala Mijas, provocando la catarsis del público en el evento cultural, que estrena este septiembre su primera edición en la localidad costasoleña y que hoy se ha inundado de sonidos roqueros, postpunk y experimentales. El grupo ha salido a escena alrededor de las 21:00 horas en el escenario principal del festival, Sunrise, donde la lluvia no ha impedido a los afanados asistentes a disfrutar de la mítica banda de los años 80.

La actuación ha comenzado con 'Get ready for love', 'There she goes my beautiful world', 'From her to eternity' y 'O children', en una noche que ha estado marcada por la interacción del artista con su público, totalmente entregado.

Le ha seguido el potente 'Jubilee street', con el que el cantante se ha acercado a los asistentes para interpretar el tema, e introduciendo partes de 'Cry' como tónica general en toda la actuación; invitando a cantar a los seguidores con las manos alzadas para sentirlo bajo las gotas de la noche. En ese momento, le han entregado desde el foso un colgante que ha paseado por el público para guardárselo seguidamente en el bolsillo.

La catarsis ha llegado cuando la batería ha hecho presencia y ha enloquecido al publico, y que Cave ha agitado acompañando con unas notas de piano, al mismo tiempo que los coristas de plateado han entonado la letra, provocando la locura en el escenario con la ovación de los seguidores.

Le han seguido 'I need you' o 'Bride horses', que ha cantado con solera en el momento mas melódico de la noche, que ha interpretado al piano para finalizar con un gran aplauso que ha agradecido.

Durante el concierto, Cave ha interactuado con su público, le ha invitado a cantar en su micrófono, e incluso ha sacado a bailar a una chica al escenario con 'Tupelo'. La emoción ha sido total entre las primeras filas, que han podido tocar al artista en numerosas ocasiones junto con los sonidos electrizantes de la banda al más puro estilo psicodélico.

La actuación ha continuado con 'Mercy seat' y 'Ship song', a la que ha seguido 'Girl in amber', con la que ha retomado el contacto mano a mano con su público y su paseillo mientras entonaba el estribillo del tema, que aclamaba a Cave desde el foso del Sonora Mijas, al que se ha arrojado con confianza y alzado en sus rodillas en numerosas ocasiones.

Una armónica ha introducido la oscura 'City of refuge', con la que el artista ha continuado recorriendo el escenario y tocando a su gente, volviendo a enloquecer al auditorio de Cala Mijas. Con el rítmico y sonoro 'White elephant' ha puesto el broche de oro a la actuación con la máxima excitación del público, tras la cual ha dado las gracias para presentar a los integrantes de su banda y dar las buenas noches.

No ha hecho falta la insistencia del auditorio para salir a cantar el turno de bises, que ha arrancado con 'Into my arms' al piano visiblemente emocionado, un melódico tema con el que los asistentes han acompañado a Cave entregados, y que éste ha aprobado con su cabeza, seguido de una gran ovación. Luego ha interpretado 'Vortex' con la contundencia de las guitarras, donde ha firmado un libro y se ha sacado la medalla entregada anteriormente.

Con 'Weeping song' se ha despedido el artista australiano de las tablas de Cala Mijas, cuyas notas  han provocado la dirección de Cave para levantar los brazos del público, rebotando las notas en las laderas de la localidad y dejando el mejor sabor de boca de la escena underground internacional en traje de chaqueta, acompañado de un gran aplauso de despedida entre un cruce de vítores y agradecimientos con los brazos en alza del foso.

El público, enloquecido durante el concierto.

Las puertas del festival abrieron a las 17:00 horas para celebrar la segunda jornada del evento musical, que se encargó de inaugurar el trío de chicas B2BBS con sus sets individuales de electrónica y su mesa de mezclas para arrancar el baile en el escenario Caleta, el más coqueto y aislado en la gran superficie del Sonora Mijas . De manera continuada prosiguieron las actuaciones escalonadamente del dúo Hermanos Muñoz con su conjunción de ritmos latinos y ambient o rhythm & blues; María Arnal i Marcel Bagés con su pop extravagante y llamativo y Queralt Lahoz, que ha reivindicado sus raíces andaluzas mezclando hip-hop, rhythm and blues y flamenco en las tablas de Renault, Sunrise y Victoria, el resto de escenarios que componen la apuesta cultural de la iniciativa Cala Mijas.

La tarde prosiguió con la sesión DJ de Joe Goddard, que ofreció de nuevo en el apartado escenario un set de música electrónica, house y con el público apuntando a la bola disco instalada en su parte superior, rememorando las pistas de baile de las décadas pasadas. La fiesta siguió en el espacio horas más tarde con la puesta en escena de Chico Blanco, el debut musical del jienense Gazzi con su electrónica cálida inyectada en su trabajo ‘I know you’ll be here’, o el dúo belga Charlotte Adigéry & bolis pupul con su sonido house groovy, que trasladaron las pistas de baile al monte mijeño.

Sonaban casi al unísono alrededor de las 20:00 horas, pero sin solaparse, el joven español Rusowsky con su 'bedroom pop' en el escenario Renault, al tiempo que la banda Meute lo hacía en el Victoria. En el ecuador de la jornada, el cantante Nick Cave ha sido el protagonista, que ha subido a las tablas del escenario principal del Sonora Mijas con su banda, The bad seeds para interpretar sus éxitos y presentar su último álbum, ‘Ghosteen’. La actuación cierra la gira europea del grupo.

Entrada ya la noche, llegó el turno para los colombianos Bomba estereo, que ofrecieron lo mejor de su cumbia psicodélica para presentar su nuevo trabajo, ‘Deja’, que fusiona la electrónica con la champeta, el reggae o el rock. La actuación comenzó con 'Aire, agua, fuego', 'Pájaro' con un baile tropical, al que siguió 'Sintiendo'.

El concierto de Bomba estereo en el festival Cala Mijas.

Con 'Somos dos' hizo al público mover las caderas para continuar con 'To my love', donde el grupo expresó su amor ante las críticas y a sus asistentes. Durante la actuación, el auditorio disfrutó de los sonidos selváticos, percusiones folclóricas colombianas y ritmos latinos de temas como 'Soy lo que soy' para finalizar interpretando su exitoso 'Fuego'.

De forma paralela salía a escena Kraftwerk en el Victoria con su fusión de rock psicodélico y progresivo con la música de vanguardia electrónica que lleva sonando desde la década de los 70. La madrugada entró de lleno en el Sonora Mijas con la actuación de The chemical brothers, que ofreció un nuevo espectáculo y nuevo álbum. Al mismo tiempo, en la otra punta del recinto, sonaban los platillos de Bradley Zero. 

Las sirenas anunciaban a las 00.55 horas la puesta en escena de Chemical brothers, que ha arrancó con la potente ‘Block Rockin' Beats’ en una actuación en la que el espectáculo lumínico y audiovisual fue el protagonista a modo de coloridos láseres lanzados sobre el público o personajes marcando los pasos de baile. 

La actuación de Chemical brothers.

El dúo británico convirtió así el espacio del Sonora Mijas en una pista de baile de los años 90 de la pasada década, en un concierto por el que tras el escenario desfilaron elefantes, avestruces o robots humanos digitalizados, desatando el aforo con ‘Hey boy, hey girl’ y finalizando con la étnica ‘Galvanice’.

Los más fiesteros pudieron disfrutar de las actuaciones de Hot Chip, el pop elegante y siniestro de El columpio asesino con su nuevo álbum 'Ataque Celeste’ o el tecno de Jennifer Cardini pasadas las 02:00 horas, cerrando la segunda jornada del recién inaugurado festival Jhon Talabot y 2 manyfriends con una sesión de música electrónica.