Pasión Vega regala a Málaga tres noches de "canciones universales"
La cantante malagueña llegó ayer al Cervantes para presentar 'Gracias a la vida', su nuevo trabajo con versiones de clásicos latinoamericanos · Con una banda de mariachis en el escenario, promete "sorpresas"
Málaga le impone. A pesar de cinco discos y miles de aplausos, Pasión Vega regresa a casa "nerviosa". Llegó anoche para quedarse durante tres días en el Teatro Cervantes con un nuevo regalo bajo el brazo, Gracias a la vida, el tema que popularizara otra gran voz, Mercedes Sosa y que en boca de la malagueña da título a su quinto álbum de estudio. Con las entradas prácticamente agotadas (a día de ayer apenas quedaban una decena de asientos) la cantante ofrecerá un directo con "alguna sorpresa", adelantó ayer.
"Llevamos unos dos meses de gira, me gusta haber madurado los temas antes de venir. Pero aún así me pongo nerviosa. El público de aquí me conoce mucho", expresó la artista con renovado look. Con su sempiterna sonrisa Ana María Alias recordó la versatilidad de su arte que le permite pasearse por el fado, el bolero, el pop y las rancheras con el mismo aplomo. "Cantar un tango o una copla no es tan distinto. La temática es común, el desamor, el desengaño... Son canciones universales, las canto y no hay más. Nosotros mismos a veces nos ponemos etiquetas e intentamos ponerle nombre a aquello que no lo tiene", sostuvo la artista. "Yo hago gala de ser una cantante andaluza y española pero eso no me limita", matizó. Acostumbrada desde pequeña a canta por los pasillos por Gardel, Mercedes Sosas o María Dolores Pradera, Pasión Vega se siente ahora más ligada a la otra orilla que nunca. Para ella, Latinoamérica tiene en Andalucía "un círculo que se cierra", afirmó.
Guitarra española, violín, mandolina, bandoneón y hasta un grupo de mariachis acompañan estas tres noches a la cantante (Premio de la Música 2002, 2004, 2006 y 2007) en su recorrido por el cancionero lírico del otro lado del charco. Así, Gracias a la vida cuenta con composiciones de Pablo Milanés (De qué callada manera), Alberto Cortez (Distancia) y María Teresa Lara (Noche de ronda, además de temas como Fina estampa, de la peruana Chabuca Granda y tangos argentinos como Cuesta abajo, de Carlos Gardel.
Tras su paso por Málaga la gira continuará durante un año por teatros -excepto en verano que se trasladará a espacios abiertos- . Antes de que acabe el año, se editará un dvd con el directo ofrecido en el Teatro Nacional de Buenos Aires, y en septiembre la cantante tiene previsto ofrecer unos seis concierto con la Sinfónica de Vallés.
Preguntada por su próximo caminar en la música, Pasión reconoció su debilidad. "Cada vez me decanto más hacia mundos puros. Aún no sé cómo será el próximo disco pero tendrá un repertorio inédito y personal", confesó. La cantante no descarta, en un futuro, componer temas propios, aunque reconoce que tiene el listón muy alto. "Yo soy muy exigente. Con canciones de Ruibal, Sabina ó Perales cerca para incluir una letra suya "tendría que ser algo muy bonito y que realmente tuviera calidad, yo soy muy exigente".
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