Silvia Grijalba reivindica un espacio propio para los letristas del rock

Las distintas formas de acercarse a la música dan como resultado un abanico de tendencias y estilos con letra propia. Silvia Grijalba ha querido reunir ahora en Palabra de rock (colección Vandalia) a los mejores letristas del rock cantado en español, y reivindicar para ellos un "género propio independiente de la poesía", explicó ayer la autora durante la presentación del libro en el Museo del Patrimonio Municipal de Málaga. "Hay poemas maravillosos que no pueden ser buenas canciones", insistió.

La antología reúne letras de artistas imprescindibles del género como Kiko Veneno, Enrique Bunbury, Jaime Urrutia, Santiago Auserón, Robe Iniesta, Nacho Vegas, Javier Corcobado, Pablo Guerrero, Astrud, Fernando Márquez El Zurdo y Luis Alberto de Cuenca.

La intención de Grijalba con esta compilación no es otra que la de ofrecer una panorámica lo más amplia posible "de las distintas formas de acercarse a las canciones", acuñó. Así, se propone mostrar los hallazgos de letristas influidos por la cultura pop, el underground, el cómic, el cine, hasta los "contadores de historias tipo Bob Dylan", pasando por los más dadaístas, "o los que se acercan a la socarronería española, y los que abordan un mundo más oscuro similar al de Nick Cage, por ejemplo", resumió.

Grijalba es autora de sendas biografías de Depeche Mode (1995) ) y Dire Straits (1997), además de un libro sobre la movida madrileña bajo el lema Dios salve a la movida (Espejo de Tinta, 2006). Como novelista publicó en 2003 Alivio Rápido (Plaza y Janés) y en 2006 Atrapada en el limbo (Plaza y Janés).

En esta ocasión, la escritora y periodista ha querido profundizar en las formas más acertadas de enfrentarse a la letra de una canción. "Tiene que poder musicarse, la letra ha de amoldarse a la música, que es la base", sostuvo. A su paso por Málaga, la autora recordó como referente el monográfico que la revista Litoral dedicó a la poesía del rock en 1989.