La magia del teatro artesanal

¿quién no ha jugado alguna vez a crear divertidas e ingeniosas formas derramadas en la pared en forma de sombras? ¿O quién no se ha enfundado la mano con ocurrentes personajes y ha jugado a darles voz y crear historias? Esta ha sido desde hace siglos una de las formas más divertidas de entretener al público, sobre todo infantil. Y Málaga trae la semana que viene la magia y el encanto de teatro artesanal de la mano del XIII Festival de Títeres.

La delegada territorial de Cultura, Turismo y Deporte, Monsalud Bautista, y el coordinador del Teatro Cánovas, Antonio Navajas, presentaron ayer la decimotercera edición de uno de sus festivales más antiguos y esperados por el público, el Festival Internacional de Títeres, objetos y visual. Este año se dirige de nuevo a niños y adultos con una programación que abarca desde las propuestas más contemporáneas como el arte en vivo de Onírica Mecánica (Murcia), hasta las más tradicionales como los títeres de la veterana compañía La Tartana Teatro (Madrid). Serán cinco los espectáculos que se llevarán a escena entre el miércoles 24 y el domingo 28 de mayo con el claro objetivo de tratar con la dignidad que merece el arte escénico habitualmente considerado como colateral a los géneros llamados "serios".

Una morena muy peluda y suave con ojos amarillos penetrantes junto con un niño tritón fueron algunos de los invitados que acudieron ayer a la presentación del evento. Ellos serán los protagonistas de Namor, el niño pez, un grito de luz, esperanza, poesía, y de evocadores títeres que tras sus lentejuelas, plumas y gomaespuma lanzan un mensaje de tolerancia, amor y libertad. The Nose Theater, compañía encargada de esta obra, fue fundada en Granada por el malagueño Chema Caballero en 2014 y, según contaba ayer su director, su objetivo va más allá de entretener. Caballero declaraba que con sus espectáculos pretenden además trasladar una enseñanza social a sus espectadores, como con Soy un pájaro, una obra que trata sobre la transexualidad infantil.

La especialidad de José Diego Ramírez es jugar con las luces y las sombras, tal como deja ver el nombre de su compañía A la sombrita. Su espectáculo, Un trocito de luna, es una adaptación de ¿A qué sabes la luna? Un cuento de Michael Grejniec. Con sus manos y un foco de luz, Ramírez proyectará curiosas sombras en las que interpretará una historia de deseos que parecen inalcanzables, como la luna, pero que consiguen hacerse realidad. A medio camino de la fábula y la leyenda, el relato ofrece un a poética moraleja que habla de generosidad, solidaridad y sueños compartidos. "Si vienen a verme quizá puedan descubrir a qué sabe la Luna", invitaba ayer el director.

El rumor del ruido de la murciana Onírica Mecánica presenta una ceremonia de experiencias sonoras, donde rugen volcanes, árboles y vientos, "hay piedras, ciudades infinitas y paisajes emocionales", promete uno de sus creadores.

Tras su paso por Lisboa, Gaeta, Buenos Aires y Lima, La Canela Teatro trae a Málaga La semilla para expresar la importancia de saber ver y estimular los potenciales personales en la infancia. La dirección corre a cargo de Claudio Hochman y el resultado es un espectáculo que disfrutaran niños y padres por su original manipulación.

El rincón de los títeres, un espectáculo muy especial que festeja el 40 aniversario de La Tartana Teatro. Muchos de los personajes que han poblado las historias de esta compañía madrileña volverán a cobrar vida en una aventura increíble que hasta el momento ha logrado el Premio nacional de teatro para la infancia y la juventud, además de una nominación a los Premios Max como Mejor espectáculo infantil. Su director Juan Muñoz está centrado desde hace años en la construcción y dirección de obras, siempre con un sello innovador y una ciudad estética que traslada a escenarios de fábula.

Estas cinco historias esperan a ser visitadas en familia. Las entradas ya están a la venta, con los descuentos habituales, en la taquilla del teatro y en ticketmaster.