Jornada de descensos en los principales índices de renta variable en Europa. Los mercados han comenzado ya a rebajar el exceso acumulado de complacencia a la hora de asimilar un mayor endurecimiento de la política monetaria.

La corrección sufrida en los activos de riesgo refleja un temor a tipos más altos durante más tiempo. La abundancia de referencias macroeconómicas en EEUU y Europa en las últimas semanas apuntan en la misma dirección: resiliencia de la actividad económica y una positiva evolución del mercado laboral que se traduce en una mayor dificultad para controlar las elevadas tasas de inflación. Un escenario que llevó a los inversores a revisar sus expectativas de tipos de interés oficiales.

De esta manera la tasa terminal de la Fed se sitúa actualmente en un 5,34% en la próxima reunión de julio y en la Eurozona los inversores no descartan que el BCE acabe elevando los tipos de interés oficiales al 3,75%, que representaría su mayor nivel en dos décadas.

En el ámbito macroeconómico, cabe destacar que la inflación general en Alemania en enero repuntó a un 8,7% interanual, tras revisarse a un 8,1% interanual en el mes de diciembre por el cambio del año base a 2020. En febrero, según las encuestas del Instituto IFO de Alemania, el Índice de clima empresarial registró un nuevo repunte hasta 91,1 puntos frente a 90,1 puntos el mes anterior.

Unas perspectivas económicas que se encuentran condicionadas a la evolución de la nueva fase de la guerra en Ucrania, en una jornada en la que China y Rusia vuelven a estrechar lazos económicos y geopolíticos.

MÁS ARTÍCULOS DE OPINIÓN Ir a la sección Opinión »

Comentar

0 Comentarios

    Más comentarios